El 14 de febrero de 2025, en pleno Día de San Valentín, el Club Atlético Unión de Crespo oficializó el regreso de uno de sus hijos pródigos: Sebastián Prediger. Formado en la categoría 1986 del Verde -una camada destacada en la Liga Paranaense de Fútbol bajo la conducción del recordado Enrique “Gordo” Gigena-, Prediger compartió plantel juvenil, entre otros, con Mauro Goette, hoy ayudante de campo de Matías Zapata.
A sus 37 años y con una extensa trayectoria en el fútbol profesional argentino e internacional -incluyendo un paso por la Selección Argentina dirigida por Diego Maradona en un amistoso-, el mediocampista decidió volver a sus raíces. Lo hizo para vestir los colores del club que lo formó, y ese gesto no tardaría en transformarse en una gesta memorable.
Cuatro meses después de aquel anuncio, con el sol ocultándose y el frío marcando presencia en Crespo, Sebastián Prediger levantaba la copa del Torneo Apertura de Primera División de la Liga de Fútbol de Paraná Campaña. Rodeado de sus compañeros y ante el festejo popular, el volante central devolvía el cariño con gloria deportiva.
De la emoción al título
En plena celebración, Prediger no tenía en su poder la camiseta número 5. Durante los festejos se la había regalado a Fernando Rau, reconocido simpatizante del club. Conmovido, recibió el trofeo de manos de Alejandro Azaad, presidente de la liga, y dejó una declaración cargada de emoción en diálogo con FM Flash 107.1 mhz.
“No hay palabras para explicar las sensaciones que uno siente en este momento, de la felicidad de poder darle este título al club donde uno surgió. Sobre todo, a la ciudad de Crespo. Somos muy nuevos en esta liga y por ahí estamos en inferioridad, lo cual por momento los tres clubes, Unión, Cultural y Sarmiento, lo hemos sentido. Por eso estoy muy contento, también por todos mis compañeros de este gran plantel”, expresó el capitán.
El festejo fue acompañado por el canto de sus compañeros: “vení, vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar, y de la mano del ‘Seba’ Prediger, todos la vuelta vamos a dar”. Una muestra clara del liderazgo y la admiración que supo ganarse puertas adentro.
Campaña consagratoria
Unión de Crespo había finalizado quinto en la fase regular de la competitiva Zona Sur. Desde allí, el camino al título fue completamente fuera de casa. En octavos de final, el Verde eliminó a Independiente FBC en Hernandarias. Luego superó a Atlético María Grande en el ‘Conrado Schamle’.
Las etapas decisivas -semifinal y final- fueron series de ida y vuelta, en las que Unión también cerró como visitante. Primero ante Litoral de María Grande y, finalmente, frente a Cañadita Central de Seguí, a quien derrotó para coronarse campeón.
“Creo que somos justos campeones. En la cancha perdimos un solo partido, que fue el clásico ante Cultural. A lo largo del torneo jugamos muy bien, con mucho esfuerzo de cada integrante del plantel”, destacó Prediger al repasar la campaña.
Proyecto a largo plazo
Más allá del logro deportivo, el mediocampista puso el foco en el trabajo integral del club: “Fue muy importante que siempre mantuvimos los pies sobre la tierra. Tuvimos bien en claro qué proyecto de club nos propusimos desde principios de temporada, más allá de los resultados, más allá de que estábamos cerca de algo difícil y único”, afirmó.
Con experiencia y compromiso, el ‘Seba’ también remarcó la importancia de las divisiones formativas: “De todas formas, siempre mantuvimos nuestro objetivo planteado, de que el club crezca, que tengan su espacio los chicos que vienen desde las inferiores y dejarle algo a la institución para el día de mañana”.
