La casa tiene sus últimos nueve jugadores luego de la salida de Lucía. Los que quedan participaron este martes por la prueba del líder en busca de asegurarse al menos una semana más en la casa.
Cuando quedan los últimos nueve participantes, Gran Hermano arrancó una semana rumbo a la próxima eliminación, por lo que no hay respiro y este martes ya se resolvió el liderazgo. La competencia se intensifica dentro de la casa, donde cada instancia puede marcar el destino de los jugadores que aún sueñan con llegar a la final.
Tras la salida de Lucía en la última gala, los nueve concursantes restantes se enfrentaron a una nueva prueba del líder. Como cada semana, este desafío no solo otorga inmunidad, sino también ventajas estratégicas clave para avanzar en el juego. La tensión se hizo sentir desde el primer momento, sabiendo que quien ganara se aseguraría al menos una semana más en la casa.
Esta vez, la producción diseñó una competencia de preguntas y respuestas por proximidad, en la que los participantes debían demostrar cuánto sabían y qué tan precisos podían ser con sus respuestas. Sandra Priore, Eugenia Ruíz, Katia “La Tana” Fenocchio y Ulises Apóstolo fueron los cuatro que llegaron a la instancia final del desafío.
Un duelo de precisión entre La Tana y Ulises
Después de ir respondiendo las preguntas que hacía Santiago del Moro, el mano a mano se dio entre La Tana y Ulises. El desafío exigía pensar rápido, calcular bien y apostar a la precisión, ya que las respuestas debían acercarse lo más posible a la correcta sin pasarse ni quedar demasiado lejos.
La pregunta que definió todo fue: “¿cuántos significados tiene la palabra ‘caja’ en el diccionario de la Real Academia Española?”. Santiago del Moro les dio la pista de que eran dos cifras. Con esa mínima ayuda, ambos finalistas hicieron sus apuestas: Katia dijo 15 y Ulises que eran 17.
La respuesta oficial que reveló el conductor fue 27, por lo que el cordobés ganó el liderazgo por cuarta vez, se metió entre los mejores 8 de la competencia y eligió a Eugenia para que lo acompañe en la cena patriota. Este nuevo triunfo consolida a Ulises como uno de los jugadores más fuertes de la edición, no solo por su rendimiento en las pruebas, sino también por su capacidad de adaptación al juego.
Privilegios estratégicos en la recta final
El liderazgo no es un mero reconocimiento. El participante no solo obtuvo la inmunidad, sino que este miércoles podrá ir a cenar con un compañero y contar con el beneficio de ver en vivo toda la nominación. Poder observar quién vota a quién le permitirá anticipar movimientos, ajustar alianzas o incluso planear jugadas que podrían definir el destino de otros jugadores.
La elección de Eugenia como compañera para la cena también despierta análisis dentro y fuera de la casa. ¿Se trata de una alianza consolidada o de una jugada táctica para asegurarse apoyo más adelante? Lo cierto es que, en esta etapa del juego, cada gesto tiene peso.
Con Ulises al frente, Gran Hermano entra en una semana clave. Ya no hay margen de error, y los participantes deben combinar estrategia, vínculos y rendimiento para sobrevivir.
