El Ministerio de Salud de la Nación precisó en un informe que un segundo contagio por dengue no generaría problemas más graves en las personas.
El Comité de Vigilancia de la Gravedad y Mortalidad por Dengue, coordinado por el Ministerio de Salud de la Nación, elaboró un informe que concluye que las segundas infecciones, en su mayoría, no desarrollan formas graves.
La aparición de casos severos de dengue es multifactorial, ya que depende tanto de las condiciones del paciente como de las características del virus, sin que necesariamente esté vinculada a infecciones previas.
Según la evidencia científica considerada, el comunicado establece varios factores que pueden influir en la gravedad de las segundas infecciones y, con el objetivo de tranquilizar a la población, ofrece recomendaciones sobre qué hacer ante la aparición de síntomas.
Además de las características propias del virus, el documento señala que los factores más importantes que pueden provocar formas graves de dengue incluyen el estado de salud general de la persona, la edad, las condiciones socioambientales, la demora en la consulta médica por no reconocer los signos de alerta, dificultades para llegar a un centro de salud, diagnóstico tardío o la falta de controles médicos adecuados.
Es importante destacar que para la elaboración de este informe se revisaron los resultados de investigaciones publicadas en los últimos cinco años sobre el dengue grave y las segundas infecciones, utilizando bases de datos académicas.
El documento también ofrece recomendaciones frente a la aparición de síntomas compatibles con el dengue, tales como fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares y malestar general. Ante un segundo contagio, la conducta recomendada es la misma, independientemente de si la persona había padecido la enfermedad previamente: se debe comenzar con una hidratación adecuada y consultar a un servicio de salud. Esto permitirá una evaluación adecuada y un seguimiento más estricto en quienes lo necesiten.
La consulta temprana a los servicios de salud es una de las medidas más importantes para reducir las consecuencias negativas de la enfermedad durante una epidemia.
El documento también recuerda que la prevención del dengue es la misma tanto para quienes ya han tenido la enfermedad como para aquellos que no: eliminar los criaderos del mosquito Aedes aegypti en el hogar y tomar precauciones para evitar las picaduras, como el uso de mosquiteros, repelentes, espirales y tabletas, entre otras medidas.
Dado que ninguna medida de prevención es 100% eficaz por sí sola, es esencial combinarlas para una mayor protección contra el dengue. (Con información de NA)
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