Se llamó Germán Roque Olsen Fontana. Nació en Estación Viale y luego se fue a vivir a Sauce de Luna, Entre Ríos. La historia se empecina en olvidarlo, pero semejante estirpe de goleador primero y DT después, merece ser rescatada.
Cuenta la historia rescatada por <i>Nueva Zona</i>, que en un viaje estudiantil de su escuela primaria a Buenos Aires, quedo impresionado por la gran ciudad y le prometió a un compañerito: "Algún día volveré a esta ciudad, pero como jugador de fútbol". Y no se equivocó. No sólo volvió, sino que hizo historia. Y de la grande...
Roque Olsen Fontana nació en Viale, pero se crió en Sauce de Luna, provincia de Entre Ríos. Su capacidad y técnica futbolística lo llevaron a ser figura en el Real Madrid de España, donde a mediados de la década del ‘50 se consagró campeón de la Liga Española y de la Copa de Campeones junto a Alfredo Di Stéfano, con quien formó una dupla letal, una de las mejores de la historia madrilista. Robusto, temperamental y con un envidiable olfato de gol, Olsen Fontana fue sin dudas uno de los deportistas entrerrianos de mayor trayectoria.
Para corroborar el lugar de nacimiento de Olsen, el medio de Viale se acercó al Registro Civil de Viale, oficina en la que los funcionarios José Domingo Pérez y Fabio Del Prado rastrearon entre la frondosa documentación histórica. Desde allí se consultó a la Oficina de la capital provincial, organismo que se encargó de confirmar el dato. Si bien su familia vivió varios años en la localidad entrerriana de Sauce de Luna, Germán Roque Olsen Fontana nació en Viale el 9 de septiembre de 1925. Así lo confirma el Acta de Nacimiento a la que nuevazona pudo acceder. Un verdadero documento histórico para nuestra ciudad, que de ahora en más quedará en el gran archivo de nuestro pueblo.
Luego de sus años de jugador en Argentina y España, dirigió varios planteles europeos, entre ellos el mismísimo Barcelona, Zaragoza, Sevilla, Celta de Vigo, Las Palmas y Cádiz, entre otros.
En Paraná jugó para Peñarol y Patronato, luego en Tigre y en Racing, hasta que fue transferido al Real Madrid. Falleció en 1992 a raíz de una grave enfermedad y sus restos fueron sepultados en Sevilla, donde actualmente reside su familia.
Roque Olsen dejó un sello bien definido. Su grito de gol lo tuvo presente en Sauce de Luna, pero también lo paseó por Peñarol, Patronato, Tigre, Racing y hasta por el mismo Real Madrid de España.
<i>El goleador del pueblo</i>
Según cuenta el periodista Pablo Rochi, de chico Roque Olsen fue un corpulento centrodelantero que brillaba en el equipo del Club Social Sauce de Luna. Su llamativo físico y su habilidad para anotar goles deslumbraban no sólo en los partidos sino también en el patio de su escuela, donde plasmaba su pasión por la pelota.
A los 14 años recibió una de las noticias más importantes de su juventud. Con sus compañeros de la Escuela Primaria Nº 35 iba a conocer Buenos Aires, uno de sus sueños de chico. El viaje se concretó el 8 de noviembre, casi sobre la finalización del ciclo. En el pueblo aseguran que Olsen quedó impactado con la gran ciudad, tal es así que al regreso le comentó a uno de sus mejores amigos que iba a volver a Buenos Aires pero como jugador de fútbol.
Olsen se hizo conocido en la capital provincial luego de un viaje que realizó con el Club Social Sauce de Luna, con el cual disputó unos amistosos. En Peñarol jugó tan sólo siete partidos, suficiente para generar un fuerte interés en Patronato, institución que lo adquirió a cambio de los jugadores Mendoza, Bikupsky y Rodríguez. En El Rojinegro tuvo la oportunidad de consagrarse campeón en 1945, 1946 y 1947 -este último años se transformó en el goleador del torneo.
En 1948 participó junto con la selección de la Liga Paranaense en el Campeonato Argentino, certamen en el cual varios conjuntos de Capital Federal abrieron los ojos. De ahí en más, su carrera sería meteórica: semejante estirpe de goleador no duraría mucho tiempo sin que en Europa se enteraran. Fue así que en poco tiempo de radicado en Capital Federal, fue adquirido por los clubes europeos y la historia a partir de allí corrió por otros carriles: jugador de varios equipos y luego DT del Barcelona.
Casi olvidado en nuestro país, Olsen Fontana falleció en 1992 a raíz de una grave enfermedad y sus restos fueron sepultados en Sevilla, donde hoy reside su familia.
“Si bien el histórico goleador falleció hace más de dos décadas en España, justo sería que al menos una calle de Viale llevara al menos su nombre”, rescata Nueva Zona.
