Un joven de 15 años, perdió la vida tras caer del techo de un Club en La Banda. Testigos aseguran que la presidenta del lugar le habría ofrecido dinero para retirar el cartel.
Un trágico hecho se registró en barrio Villa Suaya, en la ciudad de La Banda, Santiago del Estero, cuando un adolescente de 15 años identificado como Lisandro Tobías Bustamante murió tras caer desde una altura de seis metros cuando intentaba descolgar un pasacalle en las instalaciones del Club Atlético Villa Suaya.
El hecho se conoció cerca de las 23.30 del pasado lunes, cuando personal de la Comisaría 14 recibió un aviso sobre una persona herida dentro del predio del club. Al arribar, los efectivos encontraron al joven tendido en la calle, inconsciente, por lo que fue trasladado de urgencia al Centro Integral de Salud de La Banda (CIS Banda).
Pese a los esfuerzos médicos, Bustamante falleció minutos después, alrededor de las 0.15. Por disposición del fiscal de turno, Dr. Hugo Herrera, se preservó la escena y se convocó al personal de Criminalística y del Departamento de Homicidios y Delitos Complejos para realizar las pericias correspondientes.
Durante la inspección ocular, los peritos hallaron una ojota sobre la estructura de concreto del tinglado y otra en el suelo, junto a una pinza que el adolescente habría utilizado para desprender uno de los extremos del cartel. La víctima no presentaba fracturas visibles, y su cuerpo fue trasladado a la morgue judicial para la autopsia y estudios histopatológicos.
Testimonios contrapuestos
Lidia, la presidente del club, tras la trágica situación habló con Radio Panorama y aportó —según su versión— datos de cómo vivía el adolescente. "Nosotros lo atendíamos porque él salía a pedir comida y se la dábamos, él dormía en la calle, hay muchos videos de él y de muchos chicos que están con problemas de adicción", dijo.
"La abuela, la tía y varios familiares suyos están con tobilleras electrónicas -afirmó la titular del club-, han estado presos, detenidos, los han largado, pero continúan con las sustancias prohibidas", remarcó enfáticamente.
Según Lidia: "A cualquiera le podía pasar (que se muriera el chico), porque casi todos los chicos se suben por las tapias, saltan, van y vuelven por el techo del tinglado", mientras que acongojada dijo: "Hoy me gustaría estar en el lugar de este niño, me hubiese muerto yo antes que él".
Consultada sobre sus padres dijo: "Su mamá tiene problemas de adiciones, su padre vivía a una cuadra del club en una casa de material y él (por la víctima) vivía tirado en una casa abandonada al costado del club".
Cuando le preguntaron si ella le pidió que subiera respondió enfática: "No, no, nadie le pidió nada, él quería el plástico para hacer un atajado, porque había mucho viento. Yo le decía 'no vas a subir, no vas a subir' y se ve que entró por algún lado. Se subió de afuera porque él cae para afuera".
"Se ve que él pegó la vuelta, ha salido desde el club y ha subido por el otro lado, no sé, la verdad", finalizó. Los dichos de la mujer, aparentemente no cayeron bien en el entorno íntimo de la víctima, quienes cerca de las 15 se llegaron hasta su casa y le arrojaron ladrillos. La vivienda de Lidia permaneció con custodia policial por orden de la Fiscalía.
Pero si bien la presidente de la institución sostuvo que el adolescente habría accedido por sus propios medios; otros lugareños en cambio remarcaron que Bustamante, comentó que iba a recibir dinero de Lidia si bajaba el pasacalle. En los próximos días, el fiscal de la causa citará a todos los testigos a la Unidad Fiscal para que —frente a él— cuenten qué vieron y qué saben sobre el hecho.
Entre las medidas que el Dr. Herrera realizará —con el objeto de determinar fehacientemente cómo se produjo la caída— pidió que peritos de Bomberos revisen las instalaciones del club. También solicitó que personal de EDESE realice un informe detallado sobre las condiciones eléctricas del club.
No descartan la hipótesis de que el menor pudo haber tocado un cable, cuando estaba a seis metros de distancia y recibió una descarga eléctrica.
Luego de conocerse las declaraciones de Ovejero, familiares y allegados del adolescente se acercaron a su domicilio y arrojaron ladrillos contra la vivienda, por lo que fue necesaria la presencia policial para resguardar el lugar.
