Un matrimonio de Gualeguaychú encontró un meteorito en un campo de la zona rural y decidió donarlo al Museo de Ciencias Naturales “Manuel Almeida”, ubicado en esa ciudad entrerriana. La pieza, metálica, de bordes irregulares, mide 15 centímetros y pesa más de un kilo.
El director del museo, Raúl Almeida, brindó detalles del caso en diálogo con Elonce. “Está en el depósito del museo esperando que sea bien analizado y registrado”, informó.
Un gesto de generosidad científica
El meteorito fue hallado por Eliseo Retamar y Sandra Arias, quienes, tras descubrir la pieza en su terreno, se contactaron con el museo. “El gesto de Eliseo es destacable. Recibimos su llamada diciendo que tenía un meteorito y quería donarlo”, relató Almeida.
“Nos llamó la atención su gesto de generosidad porque entregó algo que era valioso para él, en muchas oportunidades se lo habían querido comprar, pero él quería compartir ese hallazgo con la gente, lo cual es importante”, subrayó el director.
Según explicó, el meteorito presenta características que llamaron la atención del equipo del museo: “Es un trozo chico, muy pesado, que tiene metal porque le arrimás un metal y se prende”.
Características del hallazgo
A simple vista, se trata de un fragmento oscuro, con apariencia oxidada. “Es un trozo irregular, el color es casi como un óxido, ferroso. Entra en la mano pero pesa más de un kilo. Es una mezcla de metal”, precisó Almeida. Sin embargo, aclaró que aún no se ha determinado con certeza su composición: “Es lo que se puede observar a simple vista, sin valor técnico ni científico”.
Eliseo intentó manipular el objeto tras encontrarlo, pero “le hizo una marca, lo quiso cortar y no pudo, es muy duro y llama la atención, sobre todo el peso que tiene”, detalló Almeida.
El lugar del hallazgo también aportó una pista sobre su posible origen. “Lo de Eliseo es especial porque estaba como en un pozo y había un eucalipto quemado al lado, viejo. Dice que hace alrededor de 20 años hubo en esa zona un episodio donde cayeron meteoritos y puede ser de esa época”, señaló.
Importancia de compartir los hallazgos
Almeida valoró especialmente que el objeto no quedara oculto ni en el ámbito privado: “Hay gente que encuentra cosas y las tiene en su casa como adorno o escondidas y es una lástima. El museo recibe miles de visitas y poder conocer o ver estas cosas es interesante”.
Además, remarcó que “también es común encontrar restos paleontológicos de animales de la mega fauna en los cauces de ríos y arroyos y siempre es interesante compartirlas”. Elonce.com
