REDACCIÓN ELONCE
Se presentó este viernes en el Teatro 3 de Febrero la obra “Un grito en la voz”, un homenaje teatral y musical a la emblemática Mercedes Sosa, ícono de la cultura popular argentina y símbolo de lucha y compromiso social en toda Latinoamérica.
Se presentó este viernes en el Teatro 3 de Febrero la obra “Un grito en la voz”, un homenaje teatral y musical a la emblemática Mercedes Sosa, ícono de la cultura popular argentina y símbolo de lucha y compromiso social en toda Latinoamérica.
El espectáculo, dirigido por la joven y reconocida Tatiana Santana y protagonizado por Pedro Frías, actor y creador de la propuesta, cumple un año desde su estreno en el Teatro del Pueblo de Buenos Aires, y en esta oportunidad emocionó al público paranaense con una puesta en escena cargada de música, poesía y memoria.
“Un grito en la voz” nació en el marco de la conmemoración por los 40 años del retorno de la democracia en Argentina. Según explicó Frías en diálogo con Elonce, la obra fue concebida con profundo respeto y admiración por la figura de Sosa: “Volver a Mercedes en este momento histórico es necesario. Representaba todo lo contrario al individualismo que vivimos hoy: la empatía, la lucha colectiva, la voz del pueblo”.
La dramaturgia se entrelaza con canciones interpretadas por Sosa durante su regreso del exilio en los años 80, en particular de los célebres 13 recitales en el Teatro Ópera, donde grabó un disco en vivo que sirve como base sonora para gran parte del espectáculo.
El elenco está conformado por Frías junto a Sonia Alemán, Guido Encinas, y el músico en vivo Gonzalo Dalairac, quienes combinan actuación, canto, danza e interpretación de instrumentos en escena.
Además del repertorio musical, la obra incluye pasajes dramatúrgicos con citas de El Principito y Antígona, que aportan profundidad simbólica y literaria a la propuesta.
La propuesta cuenta con el aval de los nietos de Mercedes Sosa, Agustín y Araceli, así como del último manager de la artista, Rodolfo Fasor, quienes celebraron el proyecto como un acto de justicia cultural. “Nos dijeron que siempre quisieron un homenaje así, pero nunca se había concretado”, relató Frías.
El espíritu íntimo y comunitario de la obra también se inspira en anécdotas personales de la cantante tucumana, como los míticos domingos de empanadas y canciones en su casa. “Era como una gran madre del pueblo”, expresó emocionado.
La obra logra conmover a públicos de todas las edades. Muchos jóvenes descubren a Mercedes a través de artistas contemporáneos como Nahuel Pennisi o Abel Pintos, mientras que espectadores mayores reviven su propia historia al escuchar temas emblemáticos.
Temas:
Homenaje Un grito en la voz
