Se realizarán este viernes empalmes en la nueva red distribuidora de agua potable en Paraná. Por ello, se restringirá temporalmente el suministro y habrá cortes parciales de tránsito.
Se ejecutarán, este viernes, dos nuevos enlaces para habilitar 2.000 metros de la nueva red distribuidora de agua potable en Paraná. Las tareas se extenderán hasta las primeras horas de la tarde y afectarán el suministro en la zona comprendida entre las calles Racedo, 9 de Julio, Enrique Carbó y avenida Ramírez.
Desde el municipio se solicitó a los automovilistas circular con precaución por la zona, ya que la calzada estará reducida por trabajos en Racedo y Yrigoyen. En la intersección de Racedo y Pascual Palma, sobre el cantero central, se unirá un nuevo conducto de 160 milímetros con una cañería de hierro fundido de 125 milímetros. Por su parte, en la intersección con Yrigoyen, se conectará una red de PV de 110 milímetros con otra de hierro fundido de 75 milímetros.
Se recomendó a los usuarios del área afectada hacer un uso racional del agua almacenada en sus tanques domiciliarios, a fin de garantizar el suministro para actividades esenciales durante el corte transitorio.
La obra general contempla la instalación de nuevas redes de abastecimiento entre las calles Cura Álvarez y Belgrano, por la acera norte, y entre avenida de Las Américas y Pascual Palma, sobre la acera sur. Esta intervención permitirá anular la antigua cañería de hierro fundido ubicada en el cantero central del bulevar.
El objetivo de las tareas es mejorar el funcionamiento del sistema de distribución de agua potable en el sector, mediante el reemplazo de la red obsoleta y la reubicación estratégica de las cañerías, de modo que futuras intervenciones no afecten la calzada asfáltica.
Los trabajos están a cargo de la Secretaría de Servicios Públicos del municipio, a través de la Subsecretaría de Obras Sanitarias.
