Sobre la orilla yacía un surubí de gran tamaño, por lo que al acercarse, se percataron que desde su boca sobresalían las patas de una tortuga, también de importantes dimensiones. De acuerdo a lo que relataron a Tal Cual, la respuesta fue directa y concisa: "Se atoró con una tortuga", cuando aparentemente el surubí haya querido convertirla en parte de su comida diaria. "Eso le pasó por angurriento", bromearon los lugareños.
El animal apareció en la costa, "estaba fresquito", contaron los testigos del hecho.