REDACCIÓN ELONCE
El barro acumulado desde febrero genera caídas de motos y accidentes en una calle de Paraná. Vecinos denuncian la falta de respuesta de las autoridades.
La acumulación de barro en la calle Sudamérica, entre Vicente Castillo y Tacuarí, en la ciudad de Paraná, generó una serie de accidentes que han puesto en peligro la seguridad de motociclistas y peatones. Desde hace un tiempo, cuando las lluvias comenzaron a azotar la región, el barro acumulado en el sector se ha convertido en un obstáculo cada vez más peligroso. Los conductores de motos han sido los más afectados, con varios accidentes reportados en los últimos meses.
"Hace unos días, una chica se quebró la rodilla justo en esta zona", agregaron en comunicación con Elonce. Según los testigos, el barro cubre gran parte de la calzada, y la falta de señalización o medidas preventivas por parte de las autoridades locales ha generado aún más inseguridad.
Falta de respuestas de las autoridades ante el reclamo vecinal
Como resultado, los vecinos optaron por cortar la calle para evitar que sigan ocurriendo accidentes y haya que lamentar otra persona herida de gravedad.
Karina, quien también reside en el lugar, agregó: “En realidad hemos llamado todos los vecinos, pero bueno, no hemos tenido ningún resultado positivo. Llamamos al 911, pero lo único que hicieron fue levantar a una señora que se quebró, vino la ambulancia, y luego se retiraron todos.”
Según los testimonios de los residentes, el miedo de que se produzca una tragedia más grave es inminente. El barro no solo afecta a los vehículos, sino que también representa un peligro para los transeúntes y niños pequeños que frecuentan la zona. “Nosotros tenemos miedo porque esto sigue así, como ustedes pudieron ver. Mucho barro, mucho barro", comentó Karina, resaltando que la situación empeora cada día que pasa.
Una solución urgente: cerrar la calle para evitar accidentes fatales
“Yo creería que cortar la calle sería una de las mejores opciones, pero en realidad no sé cómo se manejan estos temas porque no estoy en esto", añadió la vecina Karina, quien sigue pidiendo a las autoridades locales que tomen cartas en el asunto. El peligro, según ella, sigue latente cada vez que oscurece y los vecinos deben ser quienes acudan al rescate de los caídos. Además, señaló que el agua acumulada en ciertos puntos de la calle provoca la formación de pozos peligrosos que se suman a la acumulación de barro.
“Hoy salí, me caí, me lastimé el pie”, recordó Karina, quien detalló cómo uno de los incidentes más recientes la dejó con una lesión. A pesar de las quejas y los llamados de auxilio, no ha habido ninguna respuesta significativa por parte de las autoridades locales, lo que genera más frustración entre los residentes. “Yo misma caí y muchos ya se quebraron, pero nadie vino a hacer nada al respecto”, agregó.
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