REDACCIÓN ELONCE
Con temperaturas que alcanzarán los 30 grados, muchas familias y grupos de amigos aprovecharon el feriado para disfrutar del río, la playa y las primeras horas de sol de la primavera. Desde el lugar, Elonce registró testimonios y la gran concurrencia al Balneario Municipal.
El Balneario Municipal de Paraná es uno de los principales puntos de encuentro este viernes feriado, con cientos de vecinos que se acercaron a disfrutar del calor, el río y las primeras jornadas que anticipan el verano.
Desde el lugar, la cronista de Elonce, Giuliana Nassivera, describió una escena típicamente veraniega: “Hoy parece más un día de verano que de primavera. Tenemos 28°C de temperatura, según el Servicio Meteorológico Nacional, y se espera que llegue a los 31°”, señaló durante la transmisión.
El clima soleado y el buen estado del río Paraná invitaron a muchos a acercarse con reposeras, sombrillas y mates para pasar el día. “Se ve mucha gente tomando sol, otros haciendo actividades acuáticas como SUP, optimist o simplemente pescando y disfrutando de la hermosa jornada”, relató Nassivera.
Picnic, amigos y playa
Durante el recorrido por la costa, las cámaras de Elonce registraron grupos de jóvenes y familias que decidieron aprovechar el día con comidas caseras, frutas frescas y bebidas frías.
“Hace varios días que venimos a la playa. Hoy es un día soñado para disfrutar”, contó Regina, una de las jóvenes entrevistadas, mientras compartía una ensalada de frutas con amigas.
Otras vecinas se organizaron para pasar la tarde bajo los árboles: “Trajimos mate, comida saludable y hasta humus casero. Es un lugar hermoso para relajarse y compartir en familia”, comentaron mientras mostraban su picnic y presentaban a su mascota Mateo, que también acompañó la salida.
Las familias coincidieron en que el balneario municipal ofrece un entorno ideal para descansar sin salir de la ciudad. “Somos de Paraná y venimos seguido. Está todo muy lindo y tranquilo”, destacaron.
Un anticipo del verano
La postal del balneario municipal mostró a Paraná en su versión más distendida: reposeras, sombreros, risas y el murmullo del río de fondo. Con una temperatura que rozó los 31 grados, la ciudad vivió un anticipo del verano en pleno octubre.
“El río está hermoso y la gente se lo nota feliz. Es un respiro entre tanta rutina”, resumió Nassivera desde la costa paranaense.
