Un zapatero contó a <b>Elonce TV</b> que en verano la demanda baja a la mitad, pero el fuerte se registra en otoño e invierno. El costo del arreglo es de alrededor de un 35% de lo que cuesta comprar uno nuevo.
El oficio del zapatero es una de las profesiones más antiguas que existen, y abarca el diseño, confección y reparación de todo tipo de calzado. Los elevados costos que tienen los buenos zapatos obligan a que, cuando se rompen, sean llevados a arreglar. Si bien con cada temporada se van renovando al compás de la moda, muchos prefieren remendar los suyos y gastar un poco menos.
Hace 34 años, Jorge y Carmen trabajan arreglando zapatos. En diálogo con <b>Elonce TV</b>, él contó que "la gente recicla mucho, más cuando son zapatos nuevos que valen la pena hacerlos arreglar. Hay cosas que vienen de otros lados y son descartables. Tengo clientes que siempre traen los mismos, desde hace al menos 15 años".
Por su parte, ella, indicó que todos los zapatos tienen solución. "La gente se va contenta. A veces los quieren rápido, más en tiempo de clases. Usualmente vienen muchas mujeres", dijo.
Aseguran que en verano la demanda baja a la mitad, pero el fuerte se registra en otoño e invierno. El costo es alrededor de un 35% de lo que cuesta comprar uno nuevo.
Atienden diariamente en La Clínica del Calzado, ubicada en calle 25 de Junio 310. <i>Elonce.com</i>
