El piloto argentino tuvo una destacada remontada desde el puesto 20°, pero una neutralización en las últimas vueltas le impidió volver a superar a su compañero Pierre Gasly. “Llevamos las duras hasta el infinito”, ironizó Colapinto tras la carrera en diálogo con la prensa.
El piloto argentino Franco Colapinto completó una actuación meritoria en el Gran Premio de México 2025, donde finalizó en el puesto 16° tras una carrera estratégica y accidentada. Pese a largar último con un Alpine A525 que mostró falta de ritmo, el bonaerense logró escalar posiciones y mantener un ritmo competitivo en un circuito que tuvo cuatro abandonos.
“Nada puede salir peor que ayer”, había dicho Colapinto tras la clasificación del sábado. Y sobre esa base, protagonizó una recuperación destacable: aprovechó los errores y abandonos de rivales como Liam Lawson, Nico Hülkenberg y Fernando Alonso, y supo administrar su estrategia de neumáticos para mantenerse en pista.
La lucha con Gasly y la intervención del Virtual Safety Car
La carrera del argentino tuvo un momento clave en la vuelta 34, cuando superó a su compañero Pierre Gasly justo al ingresar este a boxes. Sin embargo, el francés recuperó la posición más adelante, en la vuelta 50, cuando Colapinto realizó su propio cambio de neumáticos, pasando de duros a blandos.
Con el compuesto más veloz, Colapinto comenzó a descontar segundos y se preparaba para otro sobrepaso, cuando a solo cuatro vueltas del final dos situaciones truncaron su avance: la aparición de las banderas azules, que lo obligaron a ceder el paso a los punteros Bearman y Piastri, y un incidente de Carlos Sainz que activó el Virtual Safety Car, impidiendo cualquier maniobra de sobrepaso.
La neutralización se mantuvo hasta el final, y el argentino cruzó la meta a solo 0.296 milésimas de Gasly. “Fue injusto el resultado por lo que mostró en las últimas vueltas”, coincidieron los comentaristas, destacando su consistencia en una competencia con varios abandonos.
“Llevamos las duras hasta el infinito”: la autocrítica de Colapinto
Tras la carrera, Colapinto analizó su rendimiento con autocrítica e ironía. “Hice 50 vueltas arrastrándome sin nada de grip. Con las blandas anduve bien, pero ya era tarde. Nos costó como equipo”, expresó. Sobre la estrategia, añadió con humor: “Llevamos las duras hasta el infinito. Queríamos ver hasta dónde aguantaban”.
También se refirió a un incidente con Lance Stroll, quien lo encerró en una maniobra durante las primeras vueltas: “Me tiró al pasto. No mira los espejos nunca Stroll. Hice un trompo, pero me recuperé rápido”.
Expectativas para Brasil: “Lo bueno es que de acá para arriba”
De cara al próximo compromiso, el Gran Premio de Brasil del 9 de noviembre, Colapinto se mostró optimista. “Es el Gran Premio de casa, va a haber muchos argentinos y tengo muchas ganas de disfrutarlo con ellos. Lo bueno es que peor que hoy no se puede ir, así que de acá para arriba”, señaló. (La Nación)
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