El Virrey fue homenajeado por el Xeneize, donde vivió momentos de gloria y consiguió nueve títulos. Grandes glorias del club estuvieron presentes en la ceremonia donde se descubrió la estatua al técnico más ganador de la historia de Boca.
En 1998, la vida de todos los hinchas de Boca iba a cambiar para siempre; Carlos Bianchi llegaba al club para hacerce cargo de la dirección técnica. El entrenador, que ya tenía varios títulos importantes bajo el brazo, venía a darle algo de esa mística ganadora que él tenía. Y lo logró.
Esta tarde, el DT fue homenajeado con la presentación de su tan esperada estatua, en La Bombonera, con la presencia de varias glorias del club: Juan Román Riquelme, Guillermo Barros Schelotto, Rolando Schiavi, Sebastián Battaglia, Marcelo Delgado, entre otros.
Gran parte de su familia lo acompañó, junto a unos 400 hinchas que, junto a el escultor Enrique Salvio y los jovenes emprededores del proyecto Fransico Álvarez y Gabriel Bonavena, hicieron posible la realización de una estatua a la altura del ídolo.
"Gracias a ustedes (Álvarez y Bonavena) y a los que colaboraron. Esta estatua es gracias a los jugadores, son ellos la verdadera historia del fútbol. Muchas por haber venido, nos seguiremos viendo.", declaró emocionado.
De esta manera, la estatua de Bianchi se le sumó a la de Riquelme, Ángel Rojas, Martín Palermo, el Mellizo, Diego Armando Maradona, Silvio Marzolini y Antonio Rattin. Por siempre estará ilustrado en el club y en la memoria de todos los hinchas del Xeneize.
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