REDACCIÓN ELONCE
Un grupo de pescadores atrapó una raya moturú en la Costanera de Paraná. Creyeron que se trataba de un surubí. Los videos de la inusual captura, provocaron sorpresa y comentarios. Las imágenes.
Un insólito momento se vivió este miércoles por la noche en la Costanera de Paraná, cuando un grupo de pescadores que se encontraba en uno de los muelles del Puerto Nuevo capturó una raya moturú. La situación generó sorpresa, risas y comentarios entre quienes se encontraban en el lugar, ya que todos estaban convencidos de que se trataba de un gran surubí.
Según relataron los protagonistas, la escena se dio en plena actividad nocturna de pesca. “Nochecita del miércoles en la Costanera de Paraná. En el muelle todos jurábamos que venía un surubí, pero el río siempre tiene su magia y era una raya. Así es el Paraná, te sorprende cuando menos lo esperás”, expresaron a través de las redes sociales, donde el episodio comenzó a viralizarse rápidamente.
Un momento inesperado
La captura ocurrió en uno de los muelles más visitados por pescadores y vecinos, en la zona del puerto nuevo. Allí, los aficionados suelen acercarse durante las noches para aprovechar las condiciones del río y compartir actividades recreativas al aire libre. La postal de la raya emergiendo del agua terminó convocando a curiosos que se acercaron para ver el ejemplar y registrar el momento con sus celulares.
Elonce accedió a los videos que circularon entre pescadores y ciudadanos de Paraná, sorprendidos por la presencia del ejemplar en un punto tan frecuentado de la ciudad. La situación generó comentarios entre quienes conocen la fauna del río y remarcaron que el Paraná suele ofrecer este tipo de apariciones inesperadas, especialmente durante la noche.
Devolución al río para preservar el recurso
Tras la sorpresa y las fotos de rigor, los pescadores confirmaron que la raya moturú fue devuelta al río Paraná, en línea con las prácticas responsables de pesca deportiva que incentivan el cuidado del recurso y la protección de las especies autóctonas.
El hecho volvió a poner en evidencia la riqueza natural del Paraná y su capacidad para sorprender, aún en los rincones más concurridos de la ciudad.