Un abrazo simbólico en defensa de la salud pública se realizó este miércoles en la capital entrerriana. “Nos obligan a estar acá. No nos vamos a entregar y seguiremos luchando por un salario digno”, dijeron delegados de ATE.
Un grupo de trabajadores se congregó frente al Ministerio de Salud en Paraná, en un abrazo simbólico para reclamar mejoras salariales y condiciones laborales. La jornada de protesta fue organizada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), con el objetivo de visibilizar el descontento ante "la falta de respuestas por parte de las autoridades provinciales", dijeron.
El delegado de ATE, Gustavo Skidelsky, explicó que se trató de "una jornada más para estar presente en la calle ante la falta de respuestas de quien nos tiene en jaque con nuestros bolsillos", afirmó. También destacó que han presentado un petitorio formal al ministro, el cual cuenta con el respaldo de 300 firmas, es decir, la mitad de los empleados del organismo.
"No escuchan el reclamo de los trabajadores y nos obligan a estar acá. No nos vamos a entregar y seguiremos luchando por un salario digno", advirtió Skidelsky, dejando claro que los trabajadores no abandonarán la lucha. Además, recalcó que, pese a la protesta, se sigue atendiendo a las personas que se acercan al Ministerio, ya que, según él, "la gente es rehén de todo esto".
Recortes salariales
Por otro lado, la delegada de ATE, Camila Romero, relató que, desde que recibieron "la notificación del recorte salarial a principios de junio", la situación no mejoró. Aseguró que, en ese momento, los trabajadores se reunieron con el gabinete de salud, pero las respuestas fueron insuficientes. "Lo que hacemos es visibilizar esto, defender nuestro salario es defender la salud pública", expresó la gremialista.
El reclamo principal de los trabajadores de la salud es la disparidad salarial en relación con el costo de vida. Según lo expresado por Romero, "hoy, un trabajador tendría que cobrar 1.700.000 pesos en nuestra provincia, lo que está alejado de nuestra situación".
En este sentido, indicó que la paritaria cerró con bonos en negro, lo que empeora aún más la situación, ya que no son considerados en el salario base ni en los aportes jubilatorios. Además, destacó que los recortes de horas extras también han afectado significativamente los ingresos de los trabajadores, ya que estas son un complemento importante para muchos de ellos.
La lucha por la salud, la educación y los puestos de trabajo
Según explicaron los referentes de ATE, los recortes oscilan entre los 80.000 y 100.000 pesos, y se deben a la obligación, por ley, de efectivizar una hora adicional de trabajo.
"Son momentos en los que tenemos que dar la pelea en conjunto para defender la salud, la educación y los puestos de trabajo", concluyó Romero.