La Policía de Entre Ríos detectó un cargamento ilegal de pescados en un operativo sobre la Ruta Nacional 12. Además, en otro procedimiento se secuestraron armas de fuego y piezas de caza en Tala.
En el marco de los controles que realiza la Dirección de Prevención y Seguridad Vial de la Policía de Entre Ríos, se concretaron en las últimas horas dos procedimientos por infracciones a las leyes provinciales de pesca y caza.
El primero de los operativos ocurrió este sábado 13 de septiembre, a las 13:15, en el puesto de control vial de Gualeguay, sobre la Ruta Nacional 12. Allí, los uniformados detuvieron la marcha de un automóvil Nissan Sentra negro, conducido por un hombre de 47 años oriundo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Durante la inspección, los efectivos constataron que en el vehículo se transportaban tres bolsas de nylon de color negro que contenían en su interior un total de 85 piezas de la especie tarariras. Según se informó, el cargamento no contaba con permiso de pesca y los ejemplares no respetaban las medidas reglamentarias establecidas.
Ante la situación, se dio intervención a personal de la Dirección General de Prevención de Delitos Rurales, Brigada Gualeguay, quienes labraron las actas correspondientes en el marco de la Ley Provincial de Pesca Nº 4892.
Secuestro de armas y piezas de caza en Tala
Por otra parte, personal de la Policía llevó adelante otro procedimiento en el puesto de control vial de Tala. Allí, se inspeccionó un automóvil Chevrolet Corsa conducido por un hombre mayor de edad oriundo de Rosario, provincia de Santa Fe.
Al revisar el vehículo, los uniformados hallaron dos cajas plásticas de transporte de armamento, dentro de las cuales había una carabina semiautomática marca Savage calibre .22 PLG y otra carabina semiautomática marca Magtech, del mismo calibre. Además, transportaba una pistola semiautomática Bersa calibre .22 PLG y, en el baúl, varias piezas de vizcachas.
El hecho constituyó una infracción a lo establecido en los artículos 8 y 17 de la Ley Provincial de Caza. Por este motivo, se dio intervención a la Brigada de Maciá de la Dirección General de Prevención de Delitos Rurales, que dispuso el secuestro de las armas de fuego y de las piezas de caza.
