En el Día del Trabajador, se realizó la Santa Misa en honor a San José Obrero, con una emotiva bendición de herramientas y manos trabajadoras. Fotos
La Iglesia Católica conmemora este jueves 1º de mayo la Fiesta Patronal en honor a San José Obrero, patrono de los trabajadores, una fecha que combina espiritualidad y compromiso con el mundo del trabajo. En la ciudad de Paraná, la jornada comenzó con una procesión comunitaria y continuó con la celebración de la Santa Misa.
La celebración fue presidida por el arzobispo de Paraná, monseñor Juan Alberto Puiggari, y contó con la participación activa de vecinos, trabajadores y representantes de distintas comunidades.
Una jornada de fe y reconocimiento al trabajo
Bajo el lema "Con San José, seamos peregrinos de esperanza", la festividad puso en valor el esfuerzo de quienes, día a día, construyen con su trabajo el presente y el futuro de sus familias y del país.
Durante la ceremonia, se realizó un momento especial: la bendición de herramientas y de las manos trabajadoras, un gesto simbólico que recuerda la figura de San José como modelo de laboriosidad, humildad y entrega.
La Fiesta de San José Obrero representó una oportunidad para renovar el compromiso con la justicia social, el respeto por los derechos laborales y la dignidad del trabajo humano. La jornada continuará con distintas actividades comunitarias, en el marco de una conmemoración que une fe, tradición y esperanza para el pueblo trabajador.
