Gran Hermano entró en su recta final y esta semana sorprendió con el adelanto de la gala de nominación. Con seis participantes en placa y sin posibilidad de cambios por parte del líder, el domingo uno de ellos quedará fuera del juego.
Arrancó una nueva semana en la casa de Gran Hermano. El reality entra en su recta final con solo diez participantes en juego. Como cada ciclo, la tensión aumenta y las estrategias se intensifican. Pero esta semana hubo un giro: se adelantó la gala de nominación y ya se definió la placa definitiva de cara a la eliminación del domingo.
El lunes se resolvió la prueba de liderazgo y Santiago fue consagrado como el nuevo líder. Sin embargo, la sorpresa llegó al día siguiente, cuando la producción decidió realizar la gala de nominación el martes, en lugar del clásico miércoles. Esto dejó sin margen de maniobra a los jugadores.
El mayor cambio de la semana fue la modificación en los beneficios del liderazgo. “Y como el líder ya no tiene la potestad de modificar la placa de nominados, la de este martes es la definitiva de cara a la eliminación del domingo”. De esta manera, los votos emitidos por los jugadores quedaron firmes, sin posibilidad de ser alterados.
Nominaciones y votos anulados: quiénes están en placa
El escenario se volvió más ajustado con la salida de varios participantes en las últimas semanas. Con tan poca gente en la casa, cada voto pesa mucho más. Además, esta semana los votos de dos jugadores fueron anulados: Con poca gente en la casa, y los votos anulados a ‘Tato’ y Luz, solo se salvaron de la placa el líder, junto con Sandra, Lourdes y Eugenia.
Los nombres que quedaron en la placa de nominados fueron seis, lo que promete una gala de eliminación intensa y con final abierto. Esta vez, el público deberá decidir entre Ulises, Selva, Juan Pablo, Lucía, Luz y Katia, todos en riesgo de abandonar la competencia este domingo.
Cuenta regresiva hacia la final: se afilan las estrategias
Con la casa cada vez más vacía, las alianzas comienzan a crujir y los vínculos se tensan. Cada paso puede ser decisivo en el tramo final del juego, donde ya no hay margen para errores ni votaciones dispersas. La nueva dinámica del liderazgo también obliga a todos a repensar su estrategia: ya no alcanza con tener un aliado en el sillón del líder.
El cambio en las reglas no solo altera el juego interno, sino también la percepción del público, que ahora tiene un rol más directo en definir el destino de los participantes desde el momento en que se arma la placa. El domingo, uno de los seis nominados se despedirá definitivamente del sueño de llegar a la final.
Con expectativas crecientes, los fanáticos ya comenzaron a movilizarse en redes sociales para apoyar a sus favoritos.
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