El DT de Patrón habló con Elonce sobre el equipo, el rendimiento colectivo, los desafíos defensivos, el mercado de pases y su visión a futuro en el club. "Si uno está cómodo y siente que le dan confianza, quiere quedarse en el lugar donde uno es feliz", expresó.
Patronato terminó la primera rueda en la Primera Nacional con un balance positivo: En charla con el programa La Cadena Entrerriana del Gol por el Streaming de Elonce, Gabriel Gómez valoró el ingreso del equipo en zona de clasificación.
El DT remarcó que el objetivo siempre fue claro desde enero: "El objetivo que nos planteamos con los dirigentes y con los jugadores fue eso: estar dentro de los clasificados. Todavía falta mucho porque creo que la parte más importante viene ahora".
La Primera Nacional
Para Gómez, el Nacional B es una categoría intensa: "Estamos en un lote donde estamos a dos puntos del 3º y a tres puntos del 14º”. Respecto al constante recambio de entrenadores, opinó: "Es una locura. El otro día leí que el 8 o 10% son los que se conservan todo el año, es muy bajo”.
También puso como ejemplo el respaldo recibido en Patronato durante una mala racha: "Tuvimos siete fechas sin ganar, con un partido con Alvarado que era muy malo, y nos bancaron. Hoy está dando resultado. Hay caso y caso, pero el proyecto se nota cuando hay una línea y respaldo".
Consultado por el aspecto emocional del grupo, Gómez recordó partidos clave: "Contra Racing de Córdoba, íbamos ganando, nos dieron vuelta y lo volvimos a dar vuelta. Es un grupo muy bueno, están muy mentalizados, quieren clasificar y se nota en el día a día".
Un tridente ofensivo temido
A la hora de hablar de los delanteros, subrayó su trabajo individual y colectivo: "Tienen talento, son goleadores. Nadie descubre nada, pero tratamos de ir buscándole la vuelta para que los tres puedan convivir con sus diferentes características".
Sobre sus tres delanteros, explicó: "Castro se tira atrás y da juego. Bonansea hace un esfuerzo bárbaro de espaldas. Marcioni es más picador, busca la profundidad. Los tres han hecho un tridente que hoy es muy respetado".
Con números concretos, remarcó su poder ofensivo: "Entre los tres suman 19 de 21 goles. Jugás contra un equipo que tiene tres jugadores así, hay que tener cuidado. Y están en un muy buen nivel desde el gol y desde el juego de equipo”.
Pero también recalcó que el equipo no depende solo de ellos: "Ofensivamente el equipo tiene muchas variantes. Hace goles de ataque organizado, de transiciones, de pelota parada. Ahora tenemos que buscar equilibrio, porque defensivamente tenemos muchos goles en contra".
Un equipo con margen de mejora
El técnico fue autocrítico al hablar de la parte defensiva: "No hablo solo de los defensores o del arquero, es un conjunto. Muchos goles fueron errores individuales. Hay que tener paciencia: un defensor de 21 años va a cometer errores".
Sobre cómo trabajan las fallas, agregó: "Les mostramos las imágenes, hablamos, lo trabajamos. Hay que buscar equilibrio para la segunda rueda. Todos generan ofensivamente, pero la parte negativa es cómo vamos a terminar más partidos en cero".
Gómez también mencionó que el equipo tiene más de una forma de jugar: "Cuando jugamos asociado, el equipo juega muy bien. Tenemos variantes. A veces abusamos del pelotazo al tanque Bonansea, como con Almagro, y lo matamos. Son cosas que hay que mejorar."
Un mercado de pases sin apuros
Respecto al rearmado del plantel, fue claro: "Ya hemos tenido dos reuniones con los dirigentes. Coincidimos mucho. Para traer, hay que traer jugadores que den soluciones, si no, no traemos. No estamos desesperados".
Y remarcó la importancia de cuidar el vestuario: "Es el alma del equipo y este grupo es espectacular. Cuando no ganábamos, siempre lo destacaba. Es un grupo bueno, de chicos que se matan entrenando”.
Proyección y sentido de pertenencia
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de continuar más allá de este torneo, fue sincero: "Si en un lugar estoy cómodo, me tienen confianza y se piensa en el futuro, yo no soy un tipo de cambiar así porque sí”.
Y explicó su forma de actuar: "Creo que actúo bien, aunque hoy no se actúa así. Si uno está cómodo y siente que le dan confianza, quiere quedarse en el lugar donde uno es feliz".
También valoró la proyección de los juveniles: "Entre Ríos tiene buenos jugadores. Patronato tiene un grupo de 6 o 7 chicos con futuro. Hay que tenerles paciencia, depende de ellos, cómo asimilan cada trabajo y situación que les toca pasar". Y cerró con esperanza: "Ojalá la próxima charla sea al final, si estamos clasificados y jugando la final, que es lo que queremos".