Unión de Santa Fe vivió un momento de extrema preocupación en la madrugada de este miércoles, cuando una granada acompañada de una nota amenazante fue hallada en la puerta de la sede del club. El incidente generó una alerta inmediata, que fue activada por un grupo de personas que pasaba por el lugar y dio aviso al 911.
La llegada de efectivos policiales y personal especializado permitió que se activara rápidamente un protocolo de seguridad. Tras una exhaustiva inspección, se determinó que el artefacto no representaba un peligro inminente de activación, por lo que fue retirado con los correspondientes equipos de protección.
Junto a la granada, de origen español y con la inscripción A.T.F. 1 (HC), se encontró un sobre marrón que contenía un mensaje dirigido específicamente a la Comisión Directiva del club, en particular a Fabián y Adrián Galeano. La nota, que se atribuye a la barrabrava del club, tenía un tono intimidatorio: “O entramos todos o la próxima explota”, además de un reclamo explícito para que cesen los intentos de involucrar a la policía en el conflicto.
La fiscalía ya se ha involucrado en el caso y ordenó que los elementos permanezcan bajo custodia mientras se elabora un informe detallado tanto sobre el explosivo como sobre el contenido de la amenaza. En paralelo, se está trabajando para identificar a los responsables mediante posibles registros de cámaras de seguridad de la zona.🔴⚪ #Unión || 🚨 En la madrugada de hoy, individuos dejaron una granada de humo y una nota en la puerta del club rojiblanco.
📌 Hay una investigación en marcha. pic.twitter.com/rvJGS75GP0
— LA CENTRAL DEPORTIVA (@lacentrald_sf) March 5, 2025
Este nuevo episodio de violencia no es un hecho aislado, ya que el conflicto entre la dirigencia de Unión y la barrabrava viene de largo tiempo. La amenaza escrita en esta ocasión replica un mensaje similar que se vio en una bandera durante el partido contra Argentinos Juniors el pasado 7 de febrero, donde se leía: “Entramos todos o no entra nadie”, acompañado de un arma de fuego y una bomba.
Este episodio pone en evidencia el creciente poder y la impunidad con la que actúan ciertos grupos violentos dentro de los clubes, lo que genera una gran alarma tanto en la comunidad de Unión como en el fútbol argentino en general. La situación ha dejado claro el peligro que representa la relación entre las barras bravas y las instituciones deportivas.
En este contexto, la dirigencia de Unión de Santa Fe se verá obligada a tomar decisiones importantes para garantizar la seguridad tanto institucional como de sus integrantes, en un clima de creciente tensión dentro del club y con la barrabrava.
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