La modelo reapareció en el ojo público tras mantener un bajo perfil desde su fallido matrimonio con Elías Piccirillo.
Jésica Cirio, reconocida por su carrera como modelo e influencer, ha vuelto a ser noticia, pero no solo por su vida amorosa. Tras haberse mantenido alejada de los medios tras su divorcio con Elías Piccirillo, Cirio decidió compartir públicamente su nueva relación con Nicolás Trombino, un empresario que, sin embargo, no goza de una imagen limpia en los círculos sociales de Buenos Aires. Según información exclusiva de Noticias Argentinas, el nuevo novio de Cirio está involucrado en un escándalo por una deuda millonaria de expensas que se ha ido acumulando desde su llegada al lujoso edificio Chateau Puerto Madero.
El edificio en cuestión, uno de los más exclusivos de la ciudad, ha sido escenario de varios conflictos legales debido a la falta de pago de Trombino, quien ha dejado de abonar las expensas desde que adquirió su departamento. A día de hoy, la deuda alcanza los 34 millones de pesos, lo que ha generado un verdadero conflicto con los administradores del complejo. Según el periodista Pampito, el empresario le debe 21 millones a una administración y otros 11 millones a otra, lo que pone en riesgo su estadía en el edificio.
La sorpresa detrás del conflicto
Lo que en un principio parecía ser un simple problema económico se complicó aún más cuando la administración del edificio descubrió un hecho insólito: el propietario registrado del departamento en el que Trombino reside está muerto. Este giro inesperado en la situación ha complicado aún más la resolución del conflicto, ya que la propiedad, aparentemente, no puede ser gestionada por una persona fallecida.
En este sentido, los administradores están investigando quién es el responsable real de la deuda, ya que según la normativa del edificio, debe haber un responsable de la propiedad y los pagos correspondientes. Los informes indican que Trombino habría llegado al departamento de forma posterior al fallecimiento del titular, lo que lo convierte en el principal sospechoso de la falta de pago. Si los administradores no logran resolver la situación legalmente, existe la posibilidad de que se le prohíba el ingreso al edificio. (Con información de NA)