La actriz Marta González habló sobre su experiencia de más de 25 años enfrentando el cáncer. La actriz se mostró sin peluca y compartió un mensaje de fortaleza, amor y acompañamiento a otras mujeres que atraviesan la enfermedad.
La actriz Marta González compartió su testimonio de vida tras más de 25 años conviviendo con el cáncer. Sin dramatismo y con una serenidad conmovedora, eligió mostrar su realidad tal como es: sin peluca, sin pestañas, pero con una profunda gratitud por estar viva.
Durante una entrevista con Héctor Maugeri para el programa +CARAS, González pidió permiso para quitarse la peluca. “¿Puedo sacármela?”, preguntó con delicadeza. Al hacerlo, dejó ver su cabeza descubierta y una decisión firme: desdramatizar la enfermedad y habitarla con dignidad.
“El dolor se convierte en amor”, expresó con calma, resumiendo en una frase lo que aprendió a lo largo de su proceso. Maugeri respondió con respeto: “Te veo y veo grandeza. Una mujer que una vez más se enfrenta a luchar por la vida”.
La actriz recordó el momento más difícil de su vida: la pérdida de su hijo Leandro, a quien amó profundamente. “Muchas veces tengo ganas de irme con Leandro”, confesó. Sin embargo, reveló que su hija la sostiene: “No te quiere Leandro todavía allá”.
“Quiero acompañar a las mujeres que están pasando lo mismo que yo”
González explicó que el amor que la une a sus hijos se transformó en motor para seguir adelante. “Una de las cosas que quiero para seguir viviendo es ayudar a las mujeres que están viviendo esto como yo. Sé que las ayudo, por lo menos es lo que me dicen. Quiero, hasta el último momento, darle a la gente todo lo que la gente me dio a mí”.
Sobre su decisión de mostrarse sin peluca, sostuvo que no se trató de una exposición sino de libertad. “No todo pasa por el pelo. El pelo crece. Y yo no sabía que tenía tantas canas”, dijo entre risas, mostrando que también el humor puede ser parte del proceso.
“La vida es hermosa… vale la pena vivir”
Cuando Maugeri le preguntó qué mensaje dejaría a las mujeres que hoy enfrentan la enfermedad, la actriz respondió con una convicción profunda: “La vida es hermosa. Allá debe ser muy lindo también… pero vale la pena vivir. Es jodido, porque ahora no tengo ni pestañas, pero estoy viva. Estoy hablando”.
Tomados de la mano, el conductor le recordó que no está sola. González asintió y concluyó con una reflexión sobre los vínculos y la familia: “Uno se convierte en padre o en hijo de los propios hijos”.
A 25 años de su diagnóstico, Marta González continúa compartiendo un mensaje de fuerza, humanidad y amor, reafirmando que la vida, aún en la adversidad, siempre vale la pena ser vivida. (fuente Caras)
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