El reporte oficial del SMN advierte la llegada de una tormenta geomagnética a la Argentina. Se esperan posibles interferencias en comunicaciones.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó la posible llegada de una tormenta geomagnética al territorio argentino, principalmente al sur del país y las zonas aledañas a la Antártida. El aviso se elaboró a partir de registros obtenidos en la Base Antártica Conjunta Orcadas, donde se realiza un monitoreo permanente del campo magnético terrestre.
Este observatorio, ubicado cerca del polo magnético y en una región libre de perturbaciones artificiales, ofrece mediciones de alta precisión sobre el comportamiento del campo magnético. Esa información resulta clave para anticipar variaciones producto de la actividad solar.
La tormenta geomagnética representa una alteración brusca del campo magnético terrestre, generada por la interacción entre el viento solar y la magnetosfera de la Tierra. Según explicó el SMN, este fenómeno puede derivar en distintos efectos sobre los sistemas tecnológicos y de navegación.
Qué efectos se prevén y qué zonas están bajo observación
En el caso particular de esta tormenta geomagnética, el SMN calificó su potencia como moderada (categoría G2) y anticipó que su impacto podría sentirse en las próximas horas. Las áreas bajo observación incluyen el sur de la Patagonia y regiones cercanas al continente antártico.
Entre las posibles consecuencias se destacan interferencias en los servicios de navegación satelital, radares, GPS y comunicaciones de radio, lo cual representa un riesgo operativo para aeronaves, embarcaciones comerciales, científicas y recreativas que operan en esa región.
"Es fundamental que las embarcaciones privadas e industriales extremen precauciones, ya que podría haber cortes temporales en las comunicaciones", advirtió el reporte. También se recomendó a los navegantes respetar estrictamente las cartas náuticas y no depender exclusivamente de dispositivos electrónicos durante las horas de mayor alteración magnética.
Precedentes recientes y origen del fenómeno
Esta no es la primera tormenta geomagnética detectada en el año. El 17 de mayo se registró una de categoría G2 (moderada) durante la madrugada, y el 29 del mismo mes, otra de mayor intensidad (categoría G3) provocada por la interacción entre corrientes rápidas y lentas de viento solar.
El fenómeno está relacionado con procesos que ocurren en el núcleo líquido y conductor del planeta. Allí, corrientes de convección generan un campo magnético que, en condiciones normales, protege a la Tierra de partículas solares. Sin embargo, cuando ese escudo natural es impactado por tormentas solares, pueden producirse perturbaciones significativas.
“El campo magnético terrestre funciona como un escudo, pero cuando el viento solar es muy intenso, ese escudo se deforma. Es ahí cuando se pueden ver auroras o sufrir fallas técnicas”, explicó un especialista del SMN. (Con información de NA)
