ATE había dispuesto un paro de actividades para participar de la marcha en apoyo a la líder peronista recientemente condenada. Desde el gobierno, aseguraron que la medida se toma para “garantizar el funcionamiento de los servicios públicos esenciales”.
El Gobierno de Javier Milei advirtió que le descontará el día a todos los trabajadores estatales que no se presenten a trabajar por la movilización convocada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en el marco de la marcha en apoyo a la expresidenta Cristina Kirchner, tras la confirmación de la Corte a su condena a seis años de prisión y la inhabilitación de por vida para ejercer cargos públicos.
La decisión del Ejecutivo fue anunciada después de que las distintas convocaran sumarse a la convocatoria para movilizarse frente a la residencia de la expresidenta. Para justificar la medida, desde la administración libertaria justificaron la decisión basándose en la "obligatoriedad de garantizar el funcionamiento de los servicios públicos esenciales".
“Tenemos que ir a la huelga y movilizarnos para frenar a una casta judicial que respondiendo a intereses económicos de minorías con privilegios en nuestro país ha decidido terminar con la democracia. No podemos permitir que una Corte usurpada tenga la facultad de proscribir dirigentes políticos en la Argentina”, señaló Rodolfo Aguiar, Secretario General del gremio.
En el mismo sentido, desde ATE remarcaron que “en este momento, no solo es la resolución de la Corte la que rompe la paz social, sino también un Gobierno nacional que ha perdido toda legitimidad. No podemos seguir tolerando a un Presidente que actúe al margen de la ley y contra la Constitución Nacional”.