REDACCIÓN ELONCE
El Gobierno entrerriano licitará la ejecución de obras en la Escuela N° 190 de Paraná. Se invertirán más de $36 millones para reparar cubiertas, sanitarios y pisos.
El Gobierno de Entre Ríos, a través del Ministerio de Planeamiento, Infraestructura y Servicios, anunció la realización de obras de reparación en sectores de cubierta, pisos y sanitarios de la Escuela N° 190 “Obispo Gelabert y Crespo”, ubicada en Avenida de las Américas N° 1901 de la ciudad de Paraná.
Los trabajos se llevarán adelante bajo la modalidad de cotejo de precios y contemplan un presupuesto oficial de $36.667.597, con un plazo de ejecución de 60 días corridos.
La intervención tiene como objetivo garantizar condiciones edilicias seguras y funcionales para alumnos, docentes y personal. El edificio escolar presenta deterioros estructurales que afectan el normal desarrollo de las actividades diarias.
La matrícula actual es de aproximadamente 380 alumnos. En el mismo predio funcionan también la Escuela Secundaria para Jóvenes y Adultos N° 144 “Carlos María Onetti”, el Jardín Lúdico Expresivo y la Escuela Nocturna N° 144.
Las obras previstas incluyen la impermeabilización de cubiertas en aulas, el reemplazo de canaletas deterioradas, la limpieza y refuerzo del sistema pluvial con cámaras y conexiones nuevas, y la reparación de pisos en patios que presentan desniveles considerados riesgosos para la comunidad educativa.
Además, se renovarán las puertas de los sanitarios y del tanque de agua por estructuras de aluminio. También se realizarán arreglos en los baños, que abarcan el sistema de desagües, iluminación, griferías y depósitos. Se retirarán, además, materiales en desuso acumulados en diversos sectores del edificio.
La directora de la institución, Graciela Ardinson, expresó: “Si bien las gestiones se hacen desde siempre, hoy tuvimos la posibilidad de concretar la licitación con vistas a realizar las reparaciones que tanto necesitamos para nuestros niños en una escuela que es única en Paraná, de jornada completa, de siete horas y media, y donde los chicos desayunan, almuerzan y meriendan”.
En cuanto al desarrollo de las clases durante la obra, Ardinson señaló: “Las obras comenzarían en diez días y si bien implicarán una reorganización de las actividades escolares, se prioriza garantizar el dictado de clases”.
También destacó el vínculo con las familias y el compromiso del equipo docente: “Mantenemos un vínculo muy fuerte con las familias porque hacemos sentir que queremos lo mejor para los niños y en ese sentido trabajamos, agradecidos a todos los compañeros docentes porque el que elige a la escuela brinda lo mejor, no solo en lo vinculado al aprendizaje, sino también en brindar ayuda necesaria a los niños en contextos vulnerables”.
