El equipo de Gustavo Alfaro perdió 5 a 2 y tiene un pie afuera de la Copa Libertadores; al término del partido, los jugadores de Sarandí se enfrentaron con la policía. Ronaldinho metió dos, uno de penal (la falta fue afuera) y un golazo.
La noche en Belo Horizonte se presentaba con la dificultad imperiosa de sumar. Arsenal se medía con el único equipo que logró ganar todos los partidos en la fase de grupos, por lo tanto conseguir un empate significaba una hazaña histórica.
El remate al travesaño de Carlos Carbonero, a los cinco minutos de juego, hacía ilusionar al elenco de Sarandí. Sorpresivamente, la primera situación de riesgo del encuentro fue para la visita y la fortuna no la acompañó.
Con atino, Atlético Mineiro reaccionó rápidamente y a los diez minutos de la primera parte, Diego Tardelli se escapó a gran velocidad y cuando quedó frente a Cristian Campestrini definió al palo izquierdo del arquero: 1 a 0 para demostrar quién era el candidato a quedarse con los tres puntos.
Además, el paraguayo Enrique Cáceres sancionó un penal a los 14 minutos, que Ronaldinho lo convirtió en el segundo tanto para el conjunto local. Para esas alturas, los conducidos por Cuca no sólo liquidaban el partido, sino que también demostraban sus serias aspiraciones a levantar la copa.
Cuando parecía que el encuentro ya estaba liquidado, pese a la precocidad del espectáculo, Diego Braghieri logró anotar el descuento para mantener con vida al conjunto de Sarandí. Con el 2 a 1 y la falta de 45 minutos, la esperanza se mantenía vigente en el estadio Independencia.
En el entretiempo, los nervios derivaron en empujones, agresiones y golpes que el árbitro paraguayo ignoró completamente. La situación caótica complicó más aún a Arsenal, ya que su desconcentración en el inicio del complemento llevó a que Luan ampliara la diferencia y marcara el 3 a 1.
La belleza aportada por Ronaldinho a los 13 minutos del segundo tiempo fue una decoración magnifica para anotar el 4 a 1. La goleada en Belo Horizonte comenzaba a ser el comienzo del fin para el conjunto de Gustavo Alfaro.
El golazo de tiro libre de Darío Benedetto cuando faltaban cinco minutos para el cierre del partido fue un premio consuelo por el esfuerzo.
Finalmente, el elenco de Cuca quiso regalarle a los argentinos el mismo resultado que obtuvieron en el Julio Humberto Grondona y con un enorme remate de larga distancia de Alecsandro, los de Belo Horizonte pusieron cifras definitivas.
El 5 a 2 final dejó a un Atlético Mineiro cada vez más consolidado y a un Arsenal de Sarandí con un pie afuera de la Copa Libertadores, ya que los del Viaducto ya no dependen de sí mismos. La única posibilidad que tienen de clasificar a los octavos de final es que The Strongesr le gane al San Pablo y en la última fecha en el Viaducto consigan un triunfo ante el equipo boliviano.
