A una semana de la partida de Miguel Ángel Russo, su ayudante más cercano, Juvenal Rodríguez, compartió una emotiva frase que le dijo antes de morir. La relación entre ambos fue muy cercana, y el afecto de los hinchas de Boca Juniors sigue vivo.
El mundo del fútbol aún sigue lamentando la partida de Miguel Ángel Russo, quien dejó una huella imborrable en Boca Juniors y en el deporte en general. A una semana de su fallecimiento, los homenajes y recuerdos continúan llenando los corazones de los hinchas y excompañeros de trabajo. En esta ocasión, fue Juvenal Rodríguez, uno de los ayudantes más cercanos a Russo, quien abrió su corazón y reveló la última frase que le dijo el entrenador antes de su partida.
Juvenal Rodríguez, quien estuvo a su lado en los últimos años de su carrera, se convirtió en uno de sus laderos más cercanos. En cada caminata hacia el banco de suplentes, se lo veía acompañando a Russo, quien, a pesar de atravesar momentos difíciles por su enfermedad, siempre mantenía una actitud de lucha. Rodríguez, emocionado por la cercanía con el entrenador, recordó cómo, incluso en los momentos más duros, Russo nunca dejó de ser un ejemplo de fortaleza.
"Desde que conocí a Miguel Russo, he disfrutado la vida. Miguel me enseñó a disfrutar la vida. Se llamaba Miguel Ángel, tenía el ángel hasta en su nombre. Para él, el silencio era una expresión de sabiduría", recordó Juvenal en diálogo con los medios. La relación entre ambos trascendió lo profesional, y la amistad y respeto mutuo quedaron reflejados en cada una de sus palabras.
"Un hombre de barrio"
Rodríguez destacó la esencia de Russo como entrenador y como persona. "Nunca lo escuché quejarse. Él decía ‘dale, dale, dale’, hasta en el entrenamiento. Fue su vida. Tan simple y tan profundo que él decía que la belleza del juego estaba en su simpleza", rememoró el ayudante. En sus recuerdos, también apareció la figura de un Russo emotivo al recordar sus años de juventud jugando al fútbol en Rosario, en canchas de barro. "Todo fue lucha, lucha, lucha. Es un hombre de barrio", expresó Rodríguez.
La despedida fue tan emotiva como todo lo vivido junto a Russo. "Le dije que lo amaba. Fue el último día. Estoy seguro de que habrá dicho ‘pelotudo, dale’", compartió Juvenal, visiblemente afectado. Esa frase, cargada de cariño y complicidad, marcó el fin de una etapa en la vida del ayudante y el inicio de un proceso de duelo y reflexión.
El hijo de Miguel Ángel Russo, Ignacio, también expresó su dolor en un emotivo posteo en las redes sociales. "Hola pa, sinceramente en este momento las palabras escasean por el nudo en la garganta y en la panza al escribir esto", escribió el futbolista de Tigre, quien recordó con cariño a su padre. "Gracias a la vida pude hacer lo que a vos más te gusta, que es el fútbol. Porque evidentemente el fútbol da vida y pucha que te dio", agregó.
El hijo de Russo también hizo mención al apoyo recibido por el mundo del fútbol, especialmente de Boca Juniors y su presidente, Juan Román Riquelme. "Es increíble el amor que le tienen. No nos va a alcanzar la vida para dar las gracias por lo que vivimos", expresó Ignacio, quien reconoció el gesto de la institución por cumplir con el último deseo de su padre.
A medida que pasan los días, el cariño por Miguel Ángel Russo se mantiene vivo. Desde su paso por Boca Juniors hasta su última etapa en el fútbol argentino, su legado sigue presente en los corazones de aquellos que lo conocieron, admiraron y respetaron. El mundo del fútbol lamenta su partida, pero también celebra su vida y su influencia en el deporte. (Con información de TN)
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