"Tengo una gran amargura. Siempre hay suspicacias con los penales y ellos pasan al frente 2-1 con un penal, así no me gusta. Me gusta que dirijan bien para los dos lados", tiró el Diez en diálogo con TNT Sports.Además, disparó que "todos los roces eran para Talleres" y concluyó en que "así no se puede jugar", pero se mostró esperanzado a pesar de una nueva caída del Lobo. "Acá no nos podemos relajar, todavía queda mucho", cerró.
Ni bien terminó el partido, a su vez, le regaló su gorra azul a Alexander Medina, el entrenador rival y quien se había declarado como un gran fanático suyo en la previa del enfrentamiento.
#TNTSports | ¡El mejor premio! Talleres ganó el partido, pero Medina se llevó la gorra de Diego Armando Maradona.#Talleres ? #Gimnasia pic.twitter.com/1guqjeevO9
— TNT Sports LA (@TNTSportsLA) 24. September 2019