La Cámara de Casación Penal ratificó la prisión perpetua para tres ex policías por el asesinato de Lucas González. El fallo también confirmó condenas por encubrimiento y dictó dos absoluciones.
Confirmaron perpetua por odio racial para tres policías. La Sala III de la Cámara Nacional de Casación Penal confirmó las condenas a prisión perpetua para tres ex integrantes de la Brigada 6 de la Policía de la Ciudad por el crimen del joven futbolista Lucas González. El hecho ocurrió el 17 de noviembre de 2021 en el barrio porteño de Barracas, cuando los agentes dispararon sin identificarse contra un auto en el que viajaban cuatro adolescentes.
Los jueces Gustavo Bruzzone, Pablo Jantus y Alberto Huarte Petite rechazaron parcialmente los recursos de las defensas y ratificaron las penas impuestas por el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N°25.
Juan José Nieva, Fabián Andrés López y Gabriel Alejandro Isassi fueron considerados coautores del delito de homicidio quíntuplemente agravado: por alevosía, odio racial, abuso de su función policial, entre otros. También se los condenó por tentativa de homicidio, privación ilegítima de la libertad y falsedad ideológica.
El operativo ilegal y los disparos
Los ex policías circulaban en un auto sin identificación ni balizas cuando interceptaron el vehículo en el que viajaban Lucas González y sus amigos, quienes habían salido de un entrenamiento en el club Barracas Central. Al no recibir señales claras de que se trataba de personal policial, los adolescentes intentaron escapar y fueron baleados.
Lucas recibió un disparo en la cabeza y murió al día siguiente en el Hospital El Cruce, en Florencio Varela. La investigación confirmó que los efectivos no se identificaron ni activaron dispositivos policiales antes de efectuar los disparos.
Penas por encubrimiento y absoluciones
La Cámara también ratificó las penas por encubrimiento y privación ilegítima de la libertad contra los efectivos Rodolfo Ozán, Fabián Du Santos, Roberto Inca y Héctor Cuevas, quienes participaron en el intento de alterar la escena y justificar el accionar de sus compañeros.
Sebastián Baidón fue absuelto del cargo de torturas por falta de certeza, aunque había sido condenado en primera instancia. También fue absuelto el comisario Juan Romero, acusado de haber participado en el encubrimiento del hecho.
Argumentos de la sentencia
El fallo subraya que los acusados actuaron sin justificación legal. “Nada los autorizaba a interceptar a las víctimas sin identificarse y disparar”, indicaron los magistrados.
Los camaristas destacaron que los jóvenes no creyeron en ningún momento que se trataba de policías y reaccionaron como víctimas de una agresión armada. Los jueces consideraron que los disparos fueron dirigidos a zonas vitales y que el accionar estuvo motivado por prejuicios raciales y abuso de poder.
La sentencia fue acompañada por el fiscal Guillermo Pérez de la Fuente y el texto completo del fallo fue difundido por el Ministerio Público Fiscal. (La Nación)