El Puerto Nuevo se llenó de color, bastones y marchas. Desde distintos lugares del país llegaron guardias de honor y bandas para hacer su presentación en la capital provincial en el IV Encuentro Nacional.
La iniciativa estuvo a cargo de la Asociación Civil Guardia del Paraná y fue el festejo tras haber cumplido este año, sus 25 años.
El viernes comenzaron a llegar las delegaciones y todas juntas tuvieron una cena de recibimiento en el Club Atlético Paraná. El sábado a la noche, las participantes se presentaron en el Teatro 3 de Febrero en una noche de gala donde actuaron en el escenario mayor.
En horas de la siesta, finalmente ayer, deleitaron al público con coreografías y desfiles en el Puerto Nuevo.
Silvia Yannitello es la presidente de la Asociación Civil Guardia del Paraná, institución que tiene personería jurídica y cuya comisión directiva está formada por los padres de las bastoneras. La coreógrafa es Angelina Netto.
En la jornada de ayer los tramos de tribunas dispuestos estaban llenos de paranaenses y también muchos se acercaron con sus sillones. El mate circuló para pasar una tarde diferente.
Cada guardia salió desde el Monumento al Policía hasta la rotonda en el Puerto Nuevo. El grupo Pegó en le Palo cerró la jornada.
“Es el cuarto encuentro que se hace en Paraná. Los dos primeros fueron en 1993, después en 1996, en 2008 cuando cumplimos 20 años y ahora. Tenemos el propósito de que sea una fiesta anual los últimos días de junio como lo hacen otras guardias del país”, dijo a diario <i>Uno</i> Yannitello.
En el encuentro se comparten experiencias y se aprende. Las chicas que participan entran en contacto con sus pares de otras provincias y ciudades y luego, a través de las redes sociales, fortalecen las relaciones, así se conocen e intercambian opiniones. Lo mismo las coordinadoras y coreógrafas.
La Guardia del Mar es una de las primeras que se formaron en el país y si bien fue invitada no pudo participar. De todos modos comenzó a realizar un registro para conformar una federación nacional, propuesta que no solo se tiene en cuenta, sino que se espera concretar.
“Esto es todo a pulmón. No depende de un municipio ni de un gobierno provincial. Lleva la venta de empanadas y de lo que sea. Las chicas que participan son las únicas que pagan para actuar una suma de 35 pesos mensuales para sostener la guardia y tienen presentaciones cada fin de semana de por medio”, señaló Silvia Yannitello.
Asimismo explicó que los cuerpos de bastoneras cumplen una función social en la contención que logran con las participantes. “Hemos tenido el 90% de chicas que no conocían los que era el Túnel y gracias a este trabajo pudieron también recorrer y conocer el país”, destacó.
Además sostiene que todas las participantes son titulares. “Todas viajan, todas comen lo mismo, cada una forma parte del grupo y todas tienen el mismo derecho a participar”.
