Darío Sztajnszrajber llegó a Paraná para disertar en La Vieja Usina. “La propuesta es recuperar algo originario de la filosofía”, dijo a Elonce TV. “Lo interesante es recuperar esa capacidad de asombro que obturamos en la vida cotidiana”.
El filósofo y conductor del programa Mentira la verdad por Canal Encuentro, Darío Sztajnszrajber, arribó a Paraná para brindar la conferencia “La filosofía, entre el arte y la ciencia”, invitado por la Universidad Autónoma de Entre Ríos (UADER).
El objetivo del encuentro es “pensar a la filosofía más allá de lo académico, y pensar a la filosofía como la capacidad que tenemos los seres humanos de pensarnos a nosotros mismos sin estar estructurados por el pensamiento utilitario que es el que domina más en la cotidianidad”, explicó el docente a <b>Elonce TV</b>.
“Todos los seres humanos nacemos con la posibilidad de cuestionarlo todo, pero es un tipo de pensar que lo tenemos un poco obturado, no está de moda, entonces es recuperar esa tradición para ofrecer otras perspectivas sobre las cosas”, agregó.
Al ser consultado por cómo surgió la idea de acercar la filosofía a la gente, Sztajnszrajber respondió: “Siempre la filosofía fue así, nació con ese espíritu pero lo fue perdiendo. Como todo, se fue institucionalizando, burocratizando y por eso la propuesta es recuperar algo originario de la filosofía. Y surge en la medida en que hay de parte de Canal Encuentro un objetivo de socialización del saber, que es un proyecto cultural. Hay una decisión de acercar los saberes a la gente por parte de Canal Encuentro”.
Entre sus filósofos preferidos, Sztajnszrajber mencionó a los clásicos Platón y Friedrich Wilhelm Nietzsche: “Aunque antagónicos, según algunos, me permiten volver a leerlos. Son obras abiertas y cada vez que los releo, encuentro nuevos sentidos”. Además, entre los contemporáneos, destacó a Jacques Derrida porque “estructura mi manera de pensar las cosas”, así como Martin Heidegger que “es el pensador del Siglo XX”.
“El origen de la filosofía está en el asombro y el asombro no es algo que en algún momento lo puede terminar de resolver. Es al revés. Lo interesante es recuperar esa capacidad de asombro que, de algún modo, la obturamos en la vida cotidiana”, redondeó el filósofo. Elonce.com