El río Guadalupe creció ocho metros en menos de una hora y arrasó un campamento juvenil. Hay cientos de evacuados, víctimas fatales confirmadas y un operativo de búsqueda que continúa.
Una trágica inundación golpeó este viernes a Texas, Estados Unidos, tras una repentina crecida del río Guadalupe. Las autoridades confirmaron que el nivel del agua subió ocho metros en apenas 45 minutos durante la madrugada, como consecuencia de intensas lluvias que dejaron unos 25 centímetros de agua en pocas horas.
Hasta el momento, se registraron 25 víctimas fatales y 20 chicas continúan desaparecidas. El foco de búsqueda se concentra en la zona del Camp Mystic, un campamento juvenil ubicado cerca del río, que quedó totalmente destruido por la fuerza del agua. En el lugar había alrededor de 750 jóvenes, de las cuales la mayoría logró ser evacuada hacia áreas seguras.
El operativo de rescate y búsqueda continúa desplegado con el apoyo de 14 helicópteros. Hasta ahora, se han rescatado 237 personas, 167 de ellas vía aérea, según informó Freeman Martin, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas. “Va a ser un evento con muchas víctimas. Lo sabemos y estamos preparados”, advirtió.
El sheriff del condado de Kerr, Larry Leitha, precisó que la cantidad de víctimas fatales fue aumentando con el correr de las horas. El viernes a la noche se habían contabilizado 24 muertes, cifra que este sábado subió a 25 con el hallazgo de otro cuerpo sin vida.🇺🇸 Flood disaster in Texas: dozens dead, at least 23 children missing
A devastating flood swept through Central Texas after torrential rains dumped a month’s worth of precipitation in just a few hours. The Guadalupe River rose nearly 8 meters in just 45 minutes, leaving… pic.twitter.com/OTjNigU60e
— Visegrád 24 (@visegrad24) July 5, 2025
El evento ocurrió cuando la tormenta sorprendió a los campamentos alrededor de la 1:30 de la madrugada. Elinor Lester, una joven de 13 años que logró ser rescatada, relató que fueron asistidas con sogas para cruzar un puente mientras el agua seguía subiendo. “El campamento quedó completamente destruido. Fue realmente aterrador”, contó.
Las autoridades locales señalaron que no hubo tiempo para desplegar operativos preventivos y que no se emitieron alertas tempranas antes de la crecida. Sin embargo, cerca de las 4 de la madrugada el Servicio Meteorológico Nacional elevó la advertencia sobre inundaciones repentinas. Se informó que el medidor de profundidad quedó sumergido, por lo que el nivel real del agua podría haber sido aún mayor al registrado oficialmente.
Videos registrados por lugareños y difundidos por medios estadounidenses mostraron cómo, en plena noche, el agua arrastró casas rodantes, vehículos y equipos de campamento. El gobernador de Texas, Greg Abbott, aseguró que el estado está empleando todos los recursos disponibles para atender la emergencia. “La prioridad inmediata es salvar vidas”, remarcó.
Más de 500 mil personas permanecían en alerta este viernes por la noche ante el riesgo de nuevas inundaciones.