Finalmente, la mediática consiguió su propósito y tras viajar al país vecino pudo ver de lejos al Sumo Pontífice. Antes, volvió a saludar al piloto del avión y también fue abucheada en Ezeiza.
Luego del escándalo por el video de su vuelo en la cabina de un avión de Austral, Vicky Xipolitakis se salió con la suya. La mediática vedette viajó en la noche del viernes a Paraguay para encontrarse con el Papa Francisco y tuvo éxito.
Según pudo saber <i>RatingCero.com</i>, Vicky presenció una de las misas del Papa en medio de la multitud y sin exclusividades. La imagen a la que se tuvo acceso fue tomada en Leon Condou, donde el Papa mantuvo un encuentro con representantes de la sociedad civil. Es por este motivo que la mediática no pudo acceder a una audiencia personal.
Este domingo se espera que el Papa esté en la misa de Ñu Guasú frente a 3 millones de personas, de la cual también participará Vicky.
<h5>Y no aprende...</h5>
Este viernes, Vicky Xipolitakis reapareció en televisión con una serie de entrevistas en las que se empecinó en pedir disculpas por su rol en el vuelo del escándalo con impostadas lágrimas, donde reiteró que viaja a Paraguay con el objetivo de obtener el perdón por parte del Papa Francisco.
Sin embargo, sus dos caras quedan cada vez más a la vista. En Twitter, se filtró una imagen en la que, lejos de las lágrimas y la tristeza, se muestra posando muy contenta dentro del avión. La Griega no escarmentó en saludar al piloto del avión y realizar chistes durante todo el vuelo.
<h5>Antes de volar, protagonizó otro escándalo en Ezeiza</h5>
En el aeropuerto, Vicky se cruzó con el plantel de la Selección de básquet de Argentina, que iba rumbo a Miami a jugar una serie de partidos amistosos. Lo particular del encuentro fue que los deportistas hicieron la fila para hacer el check-in como todos los pasajeros. Sin embargo la vedette pasó directamente al Vip, lo que provocó el enojo de muchos.
Algunos se fotografiaron con la Griega, pero luego la mayoría se indignó porque las autoridades de TAM (aerolínea por la que viajó, ya que Aerolíneas Argentinas la suspendió por cinco años) le dio un trato especial, tras el escándalo del vuelo a Rosario.
