Con humor ácido y mucha emoción, la exitosa comedia “La Noche de la Basura” llegará a Paraná en una única función. “Es una propuesta hermosa”, dijo Ranni a Elonce.
La comedia "La Noche de la Basura" se presentará en la ciudad de Paraná con una función única que promete risas, reflexión y emociones a flor de piel. La cita será el jueves 8 de mayo a las 21 horas en el Teatro 3 de Febrero.
Protagonizada por Rodolfo “Tano” Ranni y Graciela Pal, la obra ha conquistado tanto a la crítica como al público por su equilibrada mezcla de humor ácido, drama y una potente dosis de realismo que invita a pensar sobre los aspectos más profundos de la vida cotidiana.
“La Noche de la Basura” es una propuesta teatral que va más allá de la risa fácil, dejando al espectador con una sonrisa cómplice y una reflexión latente.
Una historia de vida con humor y emoción
Sobre la obra, Rodolfo Ranni expresó a Elonce: “Se trata de una comedia que fue un éxito. Yo la hice con Nana Costa hace 25 años, después con Dolores del Valle y ahora tengo la fortuna de hacerla con Graciela Pal. Es una propuesta hermosa. Cuenta la historia de un matrimonio; él es carpintero, no por casualidad se llaman María y José”.
La pieza, escrita por Beto Gianola y adaptada por Aníbal Litvin y el propio Ranni, transcurre durante la noche del casamiento del hijo de esta pareja, que atraviesa una profunda crisis. En su modesto dormitorio, los protagonistas desatan reproches, secretos y confesiones guardadas durante años.
“Tienen un hijo que se casa con una chica de alto nivel social. Hay una frase famosa en la obra: mientras ellos hablan de la noche del casamiento, él dice ‘viven en Libertador con vista al río y nosotros vivimos en el culo del mundo con vista al limonero del fondo’. Esa sería la síntesis de la obra”, relató Ranni.
Catarsis, amor y segundas oportunidades
Ranni explicó que la boda del hijo es el disparador de una intensa catarsis entre los protagonistas: “Empiezan a sacarse en cara todo lo que implica un matrimonio de hace 60 o 70 años atrás, donde el sexo era casi un tabú. Él, que es carpintero, tiene sus amantes y se empiezan a recriminar mutuamente, diciendo ‘vos esto, vos lo otro’”.
Sin embargo, pese a las tensiones, la historia tiene un desenlace positivo. “Termina bien, termina bien, por suerte. La comedia es maravillosa. Después de todo ese duelo verbal, ellos se comprenden, terminan felices y están esperando el llamado del hijo que se fue de luna de miel”, adelantó el actor.
Finalmente, Rodolfo Ranni expresó su cariño especial por la capital entrerriana: “Amo Paraná. Siempre iba a Paraná. Ese teatro magnífico que tienen... Así que ahí vamos a estar”.