“En las chamarritas encontrás letras de historia, de fauna, flora, paisajes, de tristeza y alegrías de la gente, de oficios, de artesanía. Todo lo que sea cultura, está en la chamarrita”, resaltó Víctor Acosta a Elonce.
En la continuidad del micro de “Espejo de mi tierra” en la ciudad de Diamante, en este caso se adentró a conocer más acerca del sentido de pertenencia de los habitantes. En este caso, la chamarrita y el pueblo chaná son dos cuestiones que identifican al ciudadano nativo de la localidad. En ese sentido, Elonce sostuvo un encuentro con Víctor Acosta, integrante del grupo “Las voces de Montiel”
En primera instancia, el historiador afirmó que “Tanto la chamarrita como la identidad chaná es parte de la cultura y la identidad diamantina. Tanto así que Diamante se ha convertido en el reservorio chamarrita a través de sus autores, compositores e intérpretes”.
Por otro lado, contó cómo empezó a hacerse conocida en la ciudad: “Nace en el ’78 cuando se instala acá Néstor Cuestas y todos los gurises fuimos a aprender en aquella época, hace 45 años, en la peña que se llamó ‘la chamarrita’. Todo lo que aprendimos en aquella época somos protagonistas de la cultura entrerriana”.
Sobre qué representa el estilo musical, el artista manifestó: “En las chamarritas encontrás letras de historia, de fauna, flora, paisajes, de tristeza y alegrías de la gente, de oficios, de artesanía. Todo lo que sea cultura, está en la chamarrita”.
Además, haciendo recuerdo de la tribu chaná, Acosta señaló: “Este pueblo habitó en la mitad de la provincia de Entre Ríos. Eso se determinó después de más de 300 excavaciones de los científicos, antropólogos, arqueólogos, etc. A partir de 2005, que apareció Don Blas Jaime –un chaná puro-, hemos aprendido sobre la cultura chaná”.
Además, anticipó que en su libro “La fascinante cultura chaná” agregó “todos los trabajos científicos que se han hecho a través del Conicet y, por eso, sabemos que en la mitad de Entre Ríos habitaron los chaná”.
Entre sus características, el integrante del grupo “Las voces de Montiel” los describió como un grupo “superior, a la altura de los mayas, incas y aztecas” y admitió que “todos los entrerrianos deberíamos sentirnos orgullosos de esa cultura aborigen americana”. Por otro lado, aseveró que tenían “idioma y lenguaje propio, agricultura, tenían sus propias leyendas, ejército, maestros y curanderos”, además de poseer casas cuadradas con baños”.
Para finalizar, Acosta ratificó que se siente “orgulloso” de ser de Diamante, del paisaje y de ser “una de las ciudades más culturales dela provincia de Entre Ríos” y el “reservorio de la chamarrita entrerriana”.