REDACCIÓN ELONCE
La Comisión Nacional de Valores advirtió sobre el aumento de estafas financieras virtuales con perfiles falsos y promesas de altos rendimientos. Recomendaciones para evitar caer en fraudes.
La Comisión Nacional de Valores (CNV) emitió una advertencia urgente ante el avance de estafas financieras virtuales que circulan especialmente en redes sociales y aplicaciones de mensajería como Telegram y WhatsApp. Según el organismo, los engaños apelan a perfiles falsos, logos institucionales y la supuesta validación de figuras públicas para captar fondos con promesas de ganancias rápidas. “Estas modalidades de fraude comienzan habitualmente con publicaciones o contactos directos”, precisó la CNV.
Los estafadores replican identidades visuales de empresas reales e incluso utilizan nombres de dominio y diseños web casi idénticos a los de bancos o instituciones financieras. En muchos casos, aseguran contar con la recomendación de celebridades o expertos del sector.
Además, quienes operan estos esquemas suelen exigir reiteradas transferencias alegando “códigos de activación”, “supuestos impuestos”, “tasas” o problemas técnicos que justificarían nuevos pagos. La CNV señaló que, una vez que las víctimas entregan datos personales o bancarios, quedan expuestas a maniobras difíciles de revertir.
Recomendaciones oficiales en un entorno cada vez más riesgoso
La CNV destacó que la mayoría de los contactos fraudulentos se difunden en Telegram o WhatsApp, donde la identidad del interlocutor resulta casi imposible de verificar. Para reducir riesgos, el organismo recomendó confirmar si la entidad que ofrece una inversión está inscripta en el registro oficial de agentes y plataformas autorizadas. Este paso, aclararon, es clave para evitar operaciones ilegales.
Asimismo, pidió desconfiar de cualquier propuesta que prometa rendimientos altos, rápidos o garantizados, un rasgo común de estas estafas financieras virtuales. También subrayó la importancia de no transferir fondos ni compartir información sensible con cuentas no verificadas.
Modalidades más frecuentes y víctimas cada vez más diversas
Entre los fraudes más detectados aparecen inversiones completamente falsas; ofertas que se presentan como legítimas pero desvían el dinero a cuentas de estafadores; y supuestos accesos a “información privilegiada” o “descuentos exclusivos” que presionan a tomar decisiones apresuradas. Estas prácticas, según la CNV, afectan tanto a ahorristas sin experiencia como a inversores con trayectoria.
Otros casos involucran a delincuentes que fingen pertenecer a empresas reconocidas del ámbito financiero, aunque no mantienen ningún vínculo real. Las propuestas suelen incluir “rendimientos elevados y rápidos”, beneficios exentos de impuestos o garantías inexistentes, como reembolsos inmediatos o transacciones “aseguradas”. En todos los escenarios, advirtió la CNV, los fondos terminan en manos de los estafadores y no en productos financieros legítimos.