Algunos sostienen que el asesinato de la mujer de Diego Lorenzetti podría estar ligado a deudas de juego. Qué otras líneas se manejan en torno a la muerte de Romina Aguilar.
La muerte de Romina Aguilar, la esposa de Diego Lorenzetti, el intendente de La Calera, un pueblo ubicado al noroeste de San Luis, quedó envuelta en sospechas y conmocionó a la provincia. Los medios locales confirman que se trató de un homicidio por encargo y esto abrió dos hipótesis: la que pisa más fuerte es que se trató de un ajuste de cuentas por deudas de juego de Lorenzetti, mientras que también se abrió la posibilidad de que el hecho tenga algún tinte político.
En una entrevista al canal <i>Crónica</i>, el periodista puntano Darío Agüero explicó la situación, y dio a conocer algunos aspectos de la vida del santafesino que se radicó en San Luis, para largarse a la vida política en los últimos años.
Según relata, el intendente es un apasionado por las carreras de caballos y se rumoreaba que le debía dinero a un grupo de personas, quienes ya habrían ido a reclamarle al edificio municipal en una oportunidad, pero éste se habría negado o no habría podido efectuar el pago.
Por otra parte, también se baraja la posibilidad de que se trate de una cuestión política, dado que Lorenzetti, al ganar la intendencia, desplazó a una familia que desde hace años estaba al mando de la localidad. Durante la campaña había habido agresiones hacia él, aclara Agüero, pero de otra magnitud. La investigación del crimen de Romina Aguilar tiene varias puntas para seguir.