Lo reveló la jueza que investiga el homicidio de Romina Aguilera en la entrada a su domicilio. Diego Lorenzetti le dijo que fueron 20 días antes y que están vinculadas a su "actividad política" pero que no hizo la denuncia.
El intendente de la localidad puntana de La Calera, Diego Lorenzetti, le dijo a la jueza que investiga el crimen de su mujer que antes del asesinato recibió "amenazas graves" vinculadas a su "actividad política" pero que no había radicado la denuncia.
Así lo reveló hoy la magistrada Virginia Palacios y consideró que lo dicho por Lorenzetti (38) "sería la punta del ovillo" para iniciar la investigación en torno a la posibilidad de que el homicidio de Romina Aguilar (32) responda a su labor como intendente de La Calera.
Lorenzetti ganó en las elecciones por la intendencia de La Calera de 2014, luego de haberse impuesto por sólo dos votos en la interna del PJ y desplazó del lugar a los hermanos Leyes, quienes desde hace muchos años se alternaban el mando en esa comuna, y con quienes había mantenido algunas agresiones verbales y denuncias cruzadas en la campaña.
"Dice que había recibido amenazas pero no lo tenemos constatado de manera fehaciente. (Declaró) que las amenazas habían tenido que ver con su actividad política. Pero son dichos de él, no es una cuestión que ha sido corroborada", dijo esta tarde a TN la jueza.
"El abogado del señor me comunicó hoy que había recibido una amenaza hace veinte días y que eran de un número (telefónico) privado, de una voz de sexo masculino, y por un breve período de tiempo", precisó la jueza.
Según Palacios, en esta etapa de la pesquisa "se está tomando declaración testimonial a todo el círculo tanto del señor intendente como el de la víctima" y que ya declararon, por ejemplo, una hermana y la mejor amiga de Aguilar, además del propio Lorenzetti.
La jueza opinó que "el tema de las comunicaciones puede ser determinante, o muy importante para abonar alguna de las hipótesis en las que se está trabajando". Sin embargo, Palacios se excusó de detallar cuáles son las hipótesis para no afectar el avance de la investigación: "Sería irresponsable decir 'la hipótesis es ésta' y descartar otra", evaluó.
El crimen de Aguilar fue cometido el sábado pasado a la mañana, en la puerta de la casa 1 de la manzana 78 del barrio FAECAP, en el norte de la ciudad de San Luis, donde la mujer residía junto a su esposo e hijos.
Estaba sacando del garage su camioneta Renault Duster negra cuando fue sorprendida por dos jóvenes armados que iban en moto. Los agresores la tomaron de la ropa, la arrastraron unos diez metros por el suelo, le dispararon dos balazos calibre .45, y escaparon en el mismo rodado en el que llegaron y sin robar nada.
