Flavia Lorena Bomrad quien se desempeñó como gestora de Pérez Algaba en su actividad en la compra-venta de autos lujosos, es una de las acusadas por el crimen. Declaró y dio su postura en torno al asesinato.
Flavia Lorena Bomrad, detenida por el crimen del empresario Fernando Pérez Algaba, declaró que para ella lo mataron porque "le debía plata a todo el mundo" y planteó sus dudas sobre la posible autoría de otros dos acusados.
La mujer, quien se desempeñó como gestora de Pérez Algaba en su actividad en la compra-venta de autos lujosos, es una de las acusadas por la fiscalía de Lomas de Zamora de haber participado del crimen.
"Fernando era mi amigo, en ocasiones le cuidaba el perro cuando se iba de viaje. Él estaba con el tema del Barrio de Rodríguez ´Renacer´ y estaba arreglando con Maxi una deuda que este último tenía", recordó la imputada al referirse a Maximiliano Pilepich, también imputado por homicidio.
Además, contó, al ser indagada, que con Pilepich "tenía una relación amorosa" y que cree que ni él ni Nahuel Vargas, otro amigo de la víctima, hayan cometido el homicidio.
Además, aclaró que ella habló con Pilepich y Vargas y que ellos le dijeron que creían que a Pérez Algaba lo había matado Gustavo Iglesias, alguien vinculado a la barra brava de Boca Juniors, y que según ella la víctima le debía "300 mil dólares".
También en la indagatoria le preguntaron a ella si había intentado comunicarse con Fernando cuando desapareció, aclaró que sí, pero que no le llamó la atención, ya que "siempre hacía eso, cobraba un dinero se marchaba" y creyó que "se fue del país".
"No le da el perfil a Maxi y a Nahuel para haber matado a Fernando, que la dicente no cree que ellos hayan matado a Fernando. Que no sabe quién lo hizo, que el mismo le debía plata a todo el mundo", dijo.
La mujer fue acusada por el delito de Homicidio cuádruplemente agravado por el empleo de arma de fuego, por concurso premeditado de dos o más personas, por alevosía, por placer, codicia, y Falso Testimonio".
Por el caso, además de Bomrad, se encontraban detenidos Matías Ezequiel Gil, Fernando Gastón Martín Carrizo, Luis Alberto Contreras.
En tanto, permanecían Pilepich y Vargas, sobre quienes se ordenó la captura internacional.