La docente Elisa Bovier y su colección de escarapelas: una pasión patriótica que inspira a sus alumnos

La docente Elisa Bovier no solo enseña idiomas en sus escuelas de Paraná, sino que también contagia a sus alumnos el amor por los símbolos patrios, especialmente a través de su particular pasión: coleccionar escarapelas. Con más de 40 piezas, cada una diferente en diseño, material y procedencia, se ganó el reconocimiento de colegas, padres y alumnos.

“Empezó como un hobby, y fui buscando cosas distintas que no sean siempre las mismas. Tengo muchas posibilidades de usarlas porque soy docente, y aprovecho cada fecha patria para llevar una diferente”, contó con orgullo.

Desde escarapelas bordadas con brillantitos hasta piezas hechas en cuero, macramé o lanas, su colección se fue enriqueciendo con el paso del tiempo. Muchas las adquirió en ferias de artesanos, otras le fueron regaladas por familias de alumnos o compradas durante sus viajes.

Un símbolo que trasciende el aula y fomenta la identidad nacional

Eliza da clases en la Escuela San Martín, la TCA 21 y también en la Liga de los Pueblos Libres. En todas estas instituciones, su colección de escarapelas ya forma parte de una tradición esperada por estudiantes y docentes cada semana de mayo o durante fechas conmemorativas.

“Los chicos ya me preguntan con qué escarapela voy a venir. Es como un juego educativo, ellos se entusiasman, observan, preguntan, y eso también es una forma de enseñarles a valorar nuestros símbolos”, explicó.

Su escarapela favorita —la que luce con más orgullo— es una en forma de caracol, hecha con una cinta celeste y blanca enrollada con delicadeza. “La esperé un montón. Me encanta. Es distinta, tiene algo que me representa”, señaló, emocionada.

Patriotismo desde la docencia y en cada detalle cotidiano

Elisa confiesa que su amor por la patria viene desde muy chica. Siempre colocó la bandera en su casa durante las fechas patrias, y con el paso del tiempo, su vocación docente le permitió multiplicar ese sentimiento en el aula. Aseguró que, cuanto más enseña un idioma extranjero, más valora lo propio.

“Siempre les digo a mis alumnos que no se pongan la camiseta solo para el Mundial. Así como usan ropa con banderas de otros países, también deberían usar cosas nuestras. Yo soy super patriota y trato de transmitirlo”, afirmó.