Se trató de Milicio Cabrera, un joven de 22 años de la comunidad Yasy Porá de Puerto Iguazú. De Paraná confesó que le gustó su “tranquilidad y paisajes”. Además, anticipó a Elonce que proyecta estudiar en la capital entrerriana.
Milicio Cabrera, un joven de 22 años de la comunidad Yasy Porá de Puerto Iguazú, este jueves visitó la ciudad de Paraná. Fue gracias a un intercambio logrado tras un contacto establecido por el concejal por el Frente Creer de San Benito, Gabriel Olivera.
Milicio se mostró “muy contento” de poder conocer el río Paraná, a la altura de la capital entrerriana. “Me gusta la tranquilidad y los paisajes de la ciudad”, confesó a Elonce y anticipó que pensaba recorrer las universidades para conocer las propuestas académicas, y las posibilidades para volver.
“En nuestra reserva hay 60 hectáreas y antiguamente eran dos comunidades, una era Iryapú, y otra, a dos kilómetros, Fortín M'Bororé. Por la cantidad de gente, la comunidad se distribuyó en cuatro y cada una tiene su propio líder o cacique y leyes establecidas por estos; y los chamanes”, explicó el joven al contar que convive junto a 67 familias, unas 385 personas en total. “Hoy día, la comunidad nos mantiene en nuestra propia cultura y hasta ahora vamos bien”, señaló.
Por su parte, el impulsor de la iniciativa, el concejal por el Frente Creer de San Benito, Gabriel Olivera, explicó que la visita de Milicio a Paraná surgió “en una visita a Puerto Iguazú para conocer las comunidades aborígenes; él fue nuestro nexo para contactarnos con los miembros de su comunidad, y en la devolución nos manifestó que quería conocer el río Paraná, a nuestra altura”.
“Es una honra su visita por ser los dueños de la tierra y para llevar su cultura viva a todos los puntos del país”, ponderó.
La aldea “Jasy Porá” es una comunidad mbya guaraní ubicada en un espacio de monte dentro del predio de las 600 hectáreas, en la selva Yriapú de la localidad de Puerto Iguazú, al norte de la provincia de Misiones.
La actividad económica principal de la comunidad es la elaboración y venta de artesanías con sus típicos diseños y materiales obtenidos del entorno natural. En la aldea se encuentra la feria permanente donde se exhiben y venden sus productos artesanales.
El cacique es el representante de la comunidad hacia afuera, organiza internamente a las familias en las tareas comunales, además administra y delega responsabilidades. Su elección es democrática, ya que cada integrante vota por quién considere que haya hecho una gestión loable.