Fuentes informaron que las autoridades se han dispuesto ha identificar los hogares que poseen perros en aquella región para confiscarlos y posteriormente, matarlos.
El líder norcoreano Kim Jong-un ordenó confiscar todos los perros de Pyongyang, capital del país, aduciendo que estos animales son un símbolo de la "decadencia capitalista occidental".
Esta insólita medida rige en consonancia con otras que ha tomado el polémico líder, como por ejemplo la ejecución pública de más de 150 personas por violar la prohibición que impide el consumo televisivo libre.
Fuentes informaron que las autoridades se han dispuesto ha identificar los hogares que poseen perros en aquella región para confiscarlos y posteriormente, matarlos.
Por insólito que parezca, algunos creen que la decisión tiene que ver con cumplir el objetivo de evitar que los animales formen parte de la alimentación de los coreanos de aquella región, un escenario que se ha replicado en cientos de miles de hogares norcoreanos a causa de la escasez de alimentos.
La hipótesis más fuerte sostiene que, a nivel sociocultural, la tenencia de perros está asociada a la burguesía lo que genera cierto "resentimiento" en las clases más bajas; teniendo en cuenta que en aquella región del mundo solo los oficiales de alto rango poseen perros como mascotas, mientras que la gente "normal" solo puede criar cerdos y pollos.