Se recuerda con el objetivo de abordar la necesidad de una mayor conciencia y comprensión sobre esta patología. Especialista explica cuáles son los síntomas más habituales y los tratamientos que se realizan.
El 14 de septiembre se celebra el día mundial de la Dermatitis atópica, con el objetivo de abordar la necesidad de una mayor conciencia y comprensión sobre esta patología.
La dermatitis atópica (DA), también conocida como eccema atópico, es un trastorno inflamatorio crónico de la piel que altera la barrera cutánea, y su capacidad para retener la humedad de la piel. Comienza habitualmente en el primer año de vida y puede durar hasta la edad adulta.
En lactantes afecta fundamentalmente en cara, en adolescentes y adultos en región de extensión de los miembros, especialmente codos y rodillas en forma de placa.
Puede comenzar sus síntomas en piel para luego “cambiar el órgano de choque” y manifestar síntomas como rinitis o asma pudiendo coexistir con lesiones cutáneas.
Diagnóstico de la dermatitis atópica
El diagnóstico de la dermatitis atópica es efectuado por un médico especialista (dermatólogo y alergistas), mediante una exploración de la piel, determinando los antecedentes personales y familiares del paciente sobre enfermedades atópicas.
“Es necesario realizar pruebas cutáneas para determinar la reactividad de la piel, identificar alérgenos ambientales como alimentarios en caso de alergia alimentaria”, afirmó la doctora María Cecilia Cavallo, Especialista en Alergia e Inmunología.
Enfoque adecuado
“Es importante determinar un diagnóstico correcto ya que ayuda a determinar las causas
alérgicas a la que está expuesto el paciente e instaurar el tratamiento adecuado para
corregirlas o en su caso eliminarlas”, explicó Cavallo.
Los pacientes con dermatitis atópica deberían de ser evaluados en forma multidisciplinaria tanto por especialistas Alergistas, Dermatólogos, Pediatra, medico clínico o de familia con equipo psicológico y fundaciones locales, esto ayuda que el enfoque del tratamiento, sea el más adecuado a la situación de la enfermedad.
¿Cuáles son los síntomas más habituales?
-Forma Aguda: Picor, eritema, pequeñas ampollas o supuración
-Forma Crónica: Piel seca, oscurecida y engrosada.
¿Cuáles son las causas o desencadenantes?
-Alérgenos ambientales (ácaros del polvo, caspa de animales, alérgenos inhalados
del ambiente)
-Genética (antecedentes de atopia familiar)
-Temperatura y humedad
-Jabones y detergentes fuertes
-Alérgenos alimentarios (más frecuente en niños)
-Stress
-Infecciones microbianas
-Irritantes químicos.
Repercusión en la calidad de vida
-Síntomas crónicos
-Sueño alterado
-Limitación en actividades diarias
-Autoconciencia
-Impacto en las relaciones
-Efectos secundarios al tratamiento
-Interrupción de las actividades laborales y escolares
¿Qué tratamientos se realizan?
El tratamiento de la dermatitis atópica se fundamenta en:
-Medidas generales de prevención: ropa comida, preferentemente algodón, uñas cortas y limpias para evitar rascado y sobreinfección en la piel.
-Evitar exposición a temperaturas extremas, adecuado bañado.
-Mantener una hidratación adecuada
-Tratamiento médico con cremas antiinflamatorias, inmunosupresores tópicos, antihistamincos, corticoides y tratamiento con biológicos.
