REDACCIÓN ELONCE
Monseñor Puiggari presidió la ceremonia y valoró la continuidad del encuentro con la feligresía en la Misa Crismal.
En el marco de la Semana Santa, se celebró en la ciudad de Paraná la tradicional Misa Crismal, una de las ceremonias más significativas del calendario litúrgico católico. Como cada año, la Catedral Metropolitana fue el escenario en el que se congregaron decenas de sacerdotes y numerosos fieles para renovar sus votos y bendecir los santos óleos que se utilizarán a lo largo del año en bautismos, confirmaciones, ordenaciones y unciones de los enfermos.
La ceremonia fue presidida por el Monseñor Juan Alberto Puiggari, arzobispo de Paraná, quien conversó con Elonce tras la misa y se mostró conmovido, aunque eligió no centrarse en lo que podría haber sido su última Misa Crismal como autoridad máxima de la arquidiócesis. “Lo importante es que van a seguir estas misas tan lindas con la presencia de todos los sacerdotes y hay mucha feligresía. Eso es lo importante”, expresó.
Durante el encuentro, el ambiente estuvo cargado de emoción y recogimiento, en un acto que une espiritualmente a toda la comunidad eclesial. La participación de los sacerdotes provenientes de distintas parroquias de la diócesis reafirma el sentido de unidad y comunión en esta fecha tan especial.
Un repaso por años de entrega pastoral
El Monseñor Puiggari también compartió con los presentes algunas reflexiones sobre su recorrido al frente del Arzobispado de Paraná, luego de doce años de servicio. Aunque no quiso destacar un momento específico, sus palabras reflejaron gratitud y alegría por los años transcurridos. “Hay tantos recuerdos lindos. No sabría cuál decir. Uno tiene muy presente momentos muy importantes que fue en la Diócesis. Fue un momento lindo y muy importante”, expresó con emoción.
Desde su llegada, Puiggari ha acompañado a la comunidad católica en distintos procesos espirituales, sociales y comunitarios. Su estilo pastoral se ha caracterizado por la cercanía con los fieles y la promoción de actividades que refuercen la vivencia de la fe.
La Misa Crismal de este año tuvo además un valor simbólico especial, dado que coincide con el cierre de un ciclo pastoral, a la espera de futuras definiciones sobre el relevo en el Arzobispado. No obstante, la atención se mantuvo centrada en la celebración y en la vivencia profunda del misterio pascual.
Invitan al 33° Vía Crucis Viviente del Km 5 ½
Como parte de las actividades de Semana Santa, también se lanzó oficialmente la invitación al tradicional Vía Crucis Viviente del kilómetro 5 ½, que este año celebra su edición número 33. La representación es una de las más esperadas por la comunidad paranaense, tanto por su despliegue artístico como por la profundidad espiritual que transmite.
La persona que personificará a Jesús en esta oportunidad brindó detalles sobre lo que se vivirá y destacó el valor simbólico de la puesta en escena. “Estamos promocionando y difundiendo el trigésimo tercer Vía Crucis Viviente del Kilómetro 5 ½. Se representará la vida, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Entre las cosas que rescatamos es que no hay que olvidarse que Jesús en el momento más difícil de su vida, crucificado, no renuncia a amar. Continúa y sigue amándonos. Es una buena enseñanza”, expresó con profunda convicción.
La actividad se realizará en el tradicional predio del kilómetro 5 ½, con la participación de decenas de vecinos y actores voluntarios que, año tras año, se suman a este emotivo evento. Se espera una amplia concurrencia, no solo por la calidad de la representación, sino también por el significado que tiene en la vivencia de la fe en comunidad.