A cada invitado se le entregará una copa con una señalización individual para ser utilizada toda la noche
La crisis se expande hacia todos los trabajadores que están involucrados en las celebraciones, que se calcula que son 25 personas por evento, entre DJ, iluminadores, mozos, ayudantes de cocina, chef, fotógrafos. "Es una red de trabajadores inmensa", insiste Oliva. Según Casafic, se estima que en el país hay más de 500.000 familias sin trabajar.
La industria de los salones de fiestas y organizadores de eventos está paralizada desde el 14 de marzo. Ante esta situación, y sin posibilidad de reservar fechas a nuevos clientes, Casafic articuló con representantes del sector de Mendoza, Tucumán, Santiago del Estero, Salta y San Luis para conformar un frente federal, y la semana pasada le presentaron a Cafiero un documento con propuestas. Además de medidas de precaución, como el uso de mamparas durante las entrevistas con clientes, o la utilización de kits sanitarios y la toma de temperaturas a los empleados, el sector listó detalladamente cómo planifican la vuelta de invitados a los salones de fiestas.
Las mesas de las fiestas deberán mantener una distancia de un metro y medio
Además de ayudas económicas y la eximición de impuestos asociados a la actividad, desde el sector listaron las medidas que se tomarán el día del evento. Para los especialistas en fiestas, los eventos no deben durar más de seis horas. El objetivo es disminuir la cantidad de horas en la pista de baile, lugar donde el contacto humano suele ser más estrecho.
Cada invitado deberá pasar por un proceso de sanitización
Los salones funcionarán con el 50% de la capacidad total y se instalarán dispensers con alcohol en gel y toallitas desinfectantes. Las mesas no podrán prepararse para más de seis personas y mantendrán una distancia de un metro y medio entre cada una. Por el lado de las bebidas, las barras serán más grandes que lo normal para evitar el amontonamiento.
A su vez, no se habilitará el guardarropas y todos los servicios externos, como proveedores que entreguen mercadería, no podrán ingresar al establecimiento en tanto que la mercadería deberá desinfectarse con alcohol o lavandina.
Otro rol importante será el de los invitados a la fiesta. Para los organizadores, debería haber un ingreso único. Las personas será recibidas por una sola persona y se le realizará controles: pasarán por una alfombra de sanitización, scanner de temperatura, lavado de manos con alcohol en gel, se les otorgará un tapabocas descartable y se le entregará una copa con una señalización individual para ser utilizada toda la noche. (La Nación)