Más de cien escapes adulterados fueron destruidos por disposición del Juzgado de Faltas de San José. Se trata de elementos secuestrados en controles de tránsito por incumplir la normativa que prohíbe la circulación con ruidos excesivos.
El Juzgado de Faltas de San José, junto al área de Inspección, Tránsito y Bromatología, llevó adelante la destrucción de más de un centenar de caños de escape de motocicletas, los cuales habían sido incautados en distintos operativos de control vehicular realizados en los últimos meses.
La medida fue encabezada por el Juez de Faltas Rodrigo Bravo y el Jefe de Inspección, Tránsito y Bromatología, Fabio Ferreyra, quienes explicaron que la acción se enmarca en la ordenanza municipal vigente, la cual prohíbe la circulación con elementos que superen los niveles sonoros permitidos en vehículos a combustión.
Contaminación sonora y sanciones
Los escapes destruidos no eran reglamentarios y provocaban niveles elevados de ruido, lo que genera tanto contaminación ambiental como molestias a los vecinos. Por ello, al momento de detectarse estas infracciones, las motos son retenidas y sus propietarios reciben una multa por parte del Juzgado de Faltas.

Una vez cumplidos los requisitos legales, las motocicletas son restituidas, pero solo si presentan escapes homologados, los cuales deben ser colocados para poder circular nuevamente.
Desde el municipio remarcaron que este tipo de controles busca no solo hacer cumplir la normativa vigente, sino también proteger la salud auditiva y la tranquilidad de la comunidad.