REDACCIÓN ELONCE
En una jornada cargada de afecto y homenajes, el histórico supervisor educativo vivió su último día en funciones. “La docencia es una pasión y me voy agradecido”, expresó.
Una mañana colmada de emociones, abrazos y recuerdos se vivió este viernes en el Colegio Nacional “Domingo Faustino Sarmiento” de Paraná, donde se despidió de su función como supervisor educativo Germán Traver, quien culminó una trayectoria de 43 años en la docencia, 14 de ellos dedicados al acompañamiento de instituciones en el nivel secundario.
“Es un día muy esperado, pero cuando llega moviliza mucho”, confesó Traver en diálogo con Elonce, visiblemente conmovido. Rodeado de autoridades, colegas, exalumnos y su familia, expresó su agradecimiento al sistema educativo entrerriano y remarcó que la educación secundaria “ha vivido profundas transformaciones en los últimos años, con más acceso y desafíos, pero también con muchos logros colectivos”.
Traver comenzó su carrera docente en el Colegio Nacional Justo José de Urquiza de San Nicolás, y la cierra en otro colegio nacional, en Paraná, lo que definió como “una hermosa paradoja que cierra un círculo de vida”.
Durante el homenaje, el rector Javier Albarracín destacó que Traver “fue un nexo indispensable entre la política educativa y las escuelas, siempre dispuesto, presente y comprometido con la gestión, entendida como hacer que las cosas sucedan”.
El legado de un docente apasionado
El acto incluyó gestos cálidos, palabras emotivas y un izamiento de bandera con un profundo significado, ya que fue el último que Traver encabezó como supervisor. La comunidad educativa destacó su profesionalismo, compromiso humano y capacidad para tender puentes entre los distintos actores del sistema.
“Me llevo anécdotas, aprendizajes, saberes y, sobre todo, el acompañamiento de mi familia, que siempre fue el sostén”, expresó Germán, visiblemente emocionado, al agradecer el reconocimiento recibido.
Su familia también tomó la palabra y expresó su orgullo: “Es un ejemplo de compromiso tanto en lo profesional como en lo personal”, expresó su hija, quien también sigue los pasos de su padre en la docencia.
“Logró lo que soñaba, se jubiló con el cariño de toda la comunidad educativa”, remarcaron entre abrazos.
El momento quedó sellado con un último izamiento de bandera y una ovación que resumió el cariño y respeto acumulado por años de trabajo incansable en favor de la educación pública.