

En el centro regional de referencia Gerardo Domak, ubicado en barrio Bajada Grande, se lleva adelante una jornada de concientización y promoción de la salud, enfocada especialmente en el cáncer de mama y la prevención ginecológica. La actividad se desarrolla de 8 a 13 horas y es organizada en conjunto por la Facultad de Ciencias de la Vida y la Salud, estudiantes de enfermería y el equipo de ginecología del centro.
La iniciativa forma parte de un trabajo territorial sostenido desde hace tres años en la zona, donde se han detectado importantes carencias de información sobre prácticas preventivas. Noelia Sosa, estudiante de enfermería, explicó a Elonce que “la mayoría de la población del barrio no sabe realizarse chequeos ginecológicos. Esta es una buena oportunidad para invitarlos e informarles sobre los signos de alarma y síntomas, sin necesidad de contar con turno previo”.

Por su parte, Verónica Nieto, licenciada en obstetricia, valoró el aporte del estudiantado y subrayó que “falta mucha información sobre los testeos, así que esta jornada es una gran oportunidad. También aprovechamos para realizar el test de Papanicolaou a libre demanda, lo que permite a las mujeres acceder directamente sin turno”.
Además de los test, las promotoras entregan material informativo y brindan charlas educativas. “Hay que realizarse la mamografía a partir de los 40 años, una vez por año”, indicó Nieto, y añadió que los resultados de los estudios podrán ser retirados posteriormente en el mismo centro de salud.

Otra de las estudiantes, Brisa Scetta, explicó los pasos del autoexamen de mama y su importancia para la detección temprana de posibles anomalías. “Se debe hacer después del período menstrual, cuando la mama está menos sensible. Lo ideal es realizarlo mientras una se baña, levantando el brazo y palpando con movimientos circulares. Hay que estar atentas a bultos, secreciones, enrojecimiento o piel de naranja, entre otros signos”, señaló.
Las organizadoras destacaron que la actividad busca acercar la salud a la comunidad de manera accesible y participativa, derribando barreras que muchas veces impiden el acceso a controles de rutina. “Estamos iniciando una nueva etapa con este tipo de acciones en territorio, junto al equipo de ginecología, y con muchas ganas de seguir construyendo prevención desde el contacto directo con los vecinos”, concluyó Sosa.