Vecinos del barrio José Hernández, ubicado en una de las zonas residenciales más tranquilas de la ciudad, manifestaron su preocupación por diversos problemas que afectan a la calidad de vida en el sector. Entre los reclamos más insistentes, destacan la falta de reparación de luminarias y caños de agua que presentan pérdidas desde hace meses. La comunidad afirma haber realizado múltiples gestiones sin obtener respuestas efectivas por parte de las autoridades correspondientes.

“Tiene que ver, como dijo la vecina, con el libro del Martín Fierro. Por eso de ahí todos los nombres. Es un barrio muy lindo muy tranquilo dentro de todo, pero que tenemos algunos problemas emergentes que saltan a la vista. Nosotros estamos hace bastante tiempo con reclamos de caños rotos, tenemos número de trámite, hacemos los reclamos constantemente, hay mucha oscuridad total. Acá hay siete farolas quemadas y eso implica también un poco con la seguridad del barrio”, indicaron al respecto.

De acuerdo con los testimonios, la situación de oscuridad en algunas calles se ha vuelto crítica, especialmente en horarios nocturnos. A pesar de los esfuerzos vecinales, la falta de mantenimiento en el alumbrado público incrementa la sensación de inseguridad, además de dificultar la circulación en ciertas áreas del barrio.

Iniciativas vecinales ante la falta de respuesta oficial

Preocupados por la falta de respuesta institucional, algunos vecinos decidieron organizarse para mejorar la iluminación por su cuenta, especialmente en las dos manzanas más afectadas. La comunidad adquirió y colocó reflectores en puntos estratégicos para brindar mayor visibilidad, aunque señalan que esta solución es provisoria y no sustituye al sistema de alumbrado público que debe garantizar el municipio.

“Nosotros tuvimos ya una gestión, ahora volvimos a asumir otra gestión y nos encargamos nosotros de la de toda la luminaria, es decir, de las dos manzanas. Si vos ves ahí todo está iluminado y hemos colocado reflectores en varias partes. Faltaría el arreglo de las luminarias que responden a alumbrado público municipal”, explicaron los vecinos.

Conscientes de que la seguridad está vinculada también a la iluminación, los habitantes del barrio sostienen que estos esfuerzos propios no deberían reemplazar el compromiso estatal. “Dentro de todo ahí vamos zafando, pero tampoco queremos que esto quede en la oscuridad”, puntualizaron con respecto a los riesgos que implica la falta de luz.

Pérdida de agua y contradicciones

Otro de los conflictos que más preocupa a los residentes de José Hernández es la situación del agua potable. Varias viviendas sufren pérdidas importantes a causa de cañerías rotas, algunas de las cuales llevan semanas sin ser reparadas. Este problema no sólo afecta a quienes viven cerca de las filtraciones, sino que también genera un impacto ambiental y contradice los mensajes oficiales sobre el uso responsable del agua.

“Lo que nos preocupa es que falta agua en otros lados, nos piden que cuidemos el agua, pero se contradice todo lo que se dice”, expresó uno de los referentes barriales al ser consultado por la situación.

La comunidad exige a las autoridades municipales y a la empresa prestataria del servicio de agua que intervengan de manera urgente para resolver los desperfectos. Los vecinos esperan que su reclamo no quede desoído y que se actúe con prontitud para garantizar derechos básicos como el acceso a un entorno seguro y a servicios públicos de calidad.